lunes, 22 de septiembre de 2014

La estrategia del pequinés de Alexis Ravelo

La estrategia del pequinés es una novela de este magnífico fabulador de realidad social en clave de novela negra que es Alexis Ravelo, padre literario de Eladio Monroy.

Con La estrategia del pequinés el hiperrealismo ha entrado en la novela negra.

Alguna estadística habrá que diga que es más probable que nos alcance un rayo, que tener alguna vez en la vida relación con algún capo del narcotráfico Y seguramente también diga que si tal eventualidad se produjese nadie sin excepción preferiría la opción del rayo.

En el mundo de la delincuencia organizada los errores no se pagan, se liquidan. Al contado.

La delincuencia está ahí aunque no la veamos. En nuestras preocupaciones diarias no alcanzamos a percibir esa otra realidad que convive con la nuestra. Es la parte interna del calcetín que alberga la oscuridad más hedionda.

Y de eso va la novela, de la parte oscura de la vida que pese a transcurrir a la luz del día permanece oculta a la vista. De la delincuencia que precisa de una jerarquía y un acatamiento de órdenes ciego para seguir funcionando.

Un palo, un golpe delictivo, se está planificando concienzudamente y en principio no hay que temer imprevistos; si acaso hay que temer lo previsto, aunque solo se haya identificado a nivel de sospecha.

Y de eso va la novela, de un palo. Tan bien descrito todo, que se participa activamente, literalmente el lector se funde con la novela. La estrategia del pequinés representa la realidad eliminando la distancia entre el lector y el objeto de lectura. Hiperrealismo.

Los personajes son tridimensionales: salen literalmente de las páginas y se pasean alrededor del lector. Sabemos que es ficción pero tan bien ambientada que parece real. Hiperrealismo.

Tito Marichal, el Palmera; Cora, como Jessica Lange en El Cartero siempre llama dos veces; El Rubio; Miralles, el Turco; El Gordo, ... todos, absolutamente todos entrando y saliendo de la misma estancia donde esté leyendo.

Hay droga de por medio, traficantes. Hay sicarios que hacen el trabajo sucio para que los capos no se ensucien y solo deban blanquear el dinero y no la camisa. Hay amistad y honor entre las personas que deben dar el palo acuciadas por una necesidad al borde de la desesperación. Al borde del precipicio.

Alexis Ravelo es el escritor más cercano de novela negra actual, negra de verdad, más auténtico que se pueda y se deba leer.

Sus historias y sus personajes cuentan verdades desfilando por los renglones de tinta como la realidad circula por los capilares de la sociedad.

Recuerden las reseñas sobre el mismo autor en este blog:

Eladio Monroy y Alexis Ravelo (post sobre las 3 primeras novelas de Eladio Monroy)
Morir despacio (4ª novela de Eladio Monroy)
Las flores no sangran








4 comentarios:

  1. Esta la tenga apuntada y con muchas ganas de cogerla por banda. Un placer leerte como siempre, Jordi.

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  2. Joder, es que yo voy con retraso de todo... tenia que haberla leido hace meses y aun hoy cada vez que leo una reseña positiva (tan positiva) me autoflagelo por tenerla abandonada. A ver si para el mes que viene va en serio...

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    1. Y el goze de la espera? tan sugerente como el placer de la lectura. Eso si cuando la cojas que sea para una buena tirada.
      Ánimo que todos seguimos buscando tiendas donde comprar tiempo!

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