miércoles, 27 de septiembre de 2017

Cardinal serie TV

'Cardinal' cuando el frío conserva
el cadáver
John Cardinal detective de homicidios de Toronto, regresa a Algonquìn, cerca de Ontario, donde el hielo y la nieve son tan habituales como consecuentes su frío y su sensación de soledad.

Cardinal es una serie con una doble trama lineal, la primera la investigación que lleva a cabo John Cardinal de un más que probable asesino en serie: se ha localizado el cuerpo congelado de una niña de un caso que en su día se cerró en falso al considerar una huida voluntaria; y la segunda un caso de corrupción cuyo sospechoso es el mismo John Cardinal y cuya investigación, encubierta, la lleva su compañera.

Los protagonistas principales Billy Campbell (como John Cardinal) y Karine Vanasse (como Lise Delome) son sobrios, como demanda el argumento que para nada busca el sensacionalismo y si ceñirse a mostrar unos actos y relatar unos hechos que por sí solos ya demuestran que la violencia y la maldad no precisan de luces para mostrarse en toda su crudeza.

Las investigaciones se ven arropadas por los dramas familiares de la pareja de investigadores y por sus recelos a la hora de trabajar juntos aunque sea por motivos dispares que tenderán a confluir hacia una aclaración imprescindible para establecer su credibilidad.

Una miniserie de 6 episodios, suficientes para desarrollar una historia coherente y consecuente y para evitar dispersar la atención con episodios de relleno que fatigan y no enriquecen. Suficientes para mostrar que cuando se parte de un buen texto, muy malo se ha de ser para estropear el previsible resultado.

Una serie que no da tregua ya que tanto la investigación de los asesinatos como la de la trama de corrupción consigue que no haya respiro para el espectador. Si a eso le sumamos un guión de tensión bien dosificada y que trata a los televidentes como personas adultas e inteligentes no se puede por menos que certificar que se está ante un producto bien hecho y de calidad.

La serie es una adaptación de la novela “Cuarenta formas de decir dolor” (Forty Words for Sorrow) del escritor canadiense Giles Blunt, y que debería estar disponible en librerías.

Habrá segunda y tercera temporada, en la 2ª se adaptará Black Fly Season (tercera novela de la serie de John Cardinal) y en la 3ª “By the time you read this” y “Crime Machine” (cuarta y quinta de la serie respectivamente).


domingo, 24 de septiembre de 2017

Género de violencia de David Orange

Asco y vergüenza y terror en las
víctimas.
Género de violencia es una novela que se anuncia como inspirada en hechos reales.

Es desesperante y asqueroso pensar que lo que en ella se cuenta esté inspirado en hechos reales, ya que la magnitud de depravación es de tal nivel que pensar que en nuestra cotidianeidad nos cruzamos por la calle con especímenes, que no personas, tan psicópatas como las descritas es como para encerrarse en casa y vivir de servicios a domicilio.

Silvia Folch es la inspectora de policía que tiene a su cargo la investigación de la desaparición de unas jóvenes, perfil chicas de 16 años, que se van sucediendo sin que se tenga noticia alguna, descartado pues secuestro convencional, hasta que un cadáver aparece.

Su identificación es difícil habida cuenta de lo destrozado y mancillado, desgarrado y profanado que está el cuerpo pero se obtiene confirmación de que es el de una de las desaparecidas. ¿Cómo puede alguien que se llame persona hacerle a otra persona lo que le ha hecho? ¿Y las otras chicas? ¿Han seguido el mismo destino?

La desaparición, el secuestro, ahora es un asesinato. A partir de aquí todo se acelera y quien secuestra y quien persigue parecen emprender una veloz carrera donde todo vale y el que pierde paga. La apuesta es la vida.

La novela ofrece diversas historias cruzadas que van a ir confluyendo, no sin cierta ayuda, hasta llegar a un final absolutamente catártico que permite liberar toda la tensión acumulada en la lectura.

David Orange
David Orange ha escrito una novela que tiene un tratamiento angustioso de la violencia como arma y como defensa y que sería descorazonadora sino fuera por el atisbo de esperanza con el que saluda de tanto en tanto desde sus páginas gracias a pequeños gestos y detalles cariñosos de algunos de sus protagonistas que suponen un retazo de cielo azul visto desde el infierno.

El autor juega con habilidad con los tempos de las subtramas para mostrar como desde las campañas de adocenamiento publicitario hasta los posicionamientos de poder mundano que se creen que con dinero todo es posible, desde las relaciones de pareja hasta las convivencias familiares, en todas partes vive el engaño.

Explica como la publicidad insta a obtener felicidad; como el dinero se cree que puede comprarla; las parejas se piensan que es eterna y las familias la consideran implícita en su sino hasta el punto de que no tienen en consideración la repercusión de sus actos. Y resulta que la felicidad no es el que sino con quien.

lunes, 18 de septiembre de 2017

Eran siete de Eden Phillpotts

Novela policiaca de corte tan clásico
como un chaqué.
La semana de Navidad el viejo, acaudalado y generoso Hannibal Knott tiene previsto, como suele ser habitual en esas fechas, acoger en su casa a sus siete sobrinos a los que piensa, como suele ser habitual, entregarles un regalo en forma de cheque bancario que les ayude a sobrellevar su día a día.

Los sobrinos son agradecidos pero visto como la fortuna de su anciano tío va menguando por su generosidad hacia sí mismo y terceros y las pocas ganas que muestra para dejar este mundo, sospechan que si siguen esperando a heredar de forma natural tal vez no quede nada y se plantean acelerar el proceso y permitirle una despedida indolora..

Eran siete demuestra que bajo la apariencia festiva de bondad que se presume inherente a la Navidad los sentimientos de envidia, egoísmo y rencor no dudan en asomar siempre que pueden llegando incluso a cometer un crimen si ha de ser el medio para obtener un fin.

Que el fin justifica el medio sería el axioma preferido por los heredereros, aunque no estemos ante un tío Gillito avaro y soberbio.

Un buen punto de partida para un misterio de habitación cerrada. Una buena selección de personajes. Una ambientación adecuada como son las fiestas navideñas. Todo listo para una lectura gozosa y sin embargo…

Las peroratas del viejo Hannibal Knott son de una densidad tal que el cerebro del oyente no puede por menos que empantanarse entre las largas frases y quedarse atascado y hundirse lentamente en la ciénaga de los párrafos.

Y lo que parecía una prerrogativa de su condición y su edad resulta ser el tono narrativo del autor que lo proyecta también en el resto de sus sobrinos eliminando cualquier rasgo idiosincrático de su personalidad, aparte de los pertenecientes a su físico.

Eden Philipotts
La novela empieza bien, continúa mejor y a falta de sesenta páginas se mete en un cenagal del que parece no saber cómo salir y lo consigue mediante un subterfugio, a modo de desenlace, tan tramposo como ingrato que logra igualar al lector con los sobrinos en capacidad de sorpresa, desconcierto y desilusión.

Es como si la pretensión del autor, Eden Phillpotts, hubiera cambiado a medio redactado optando por darle un giro en busca de otro final. Si así fuera se ocultan las razones que lo movieron y si no fue así es de lamentar que no lo hiciera.

La novela fue elegida con el numero 38 por Borges y Casares para su colección El séptimo círculo. Por algo sería.

jueves, 14 de septiembre de 2017

Bajo los montes de Kolima de Lionel Davidson

Se vive como una experiencia con
gafas de realidad virtual.
Los viajeros, que no turistas, saben que lo importante es el viaje; llegar al destino es la meta final, pero en si misma es solo una consecuencia, buscada y deseada, pero sin el inicio ni el desarrollo no se habría producido.

Hay novelas en que lo importante también es el viaje; el inicio se precisa para poder avanzar y el final se presupone y por eso puede quedar relegado a especulación que no precisa confirmación. Casi tanto da como acabe lo importante es lo que pase en medio y cuanto más pase mejor. Y cuanto más sorpresivo sea más mejor.

Bajo los montes de Kolima es una novela viaje.

Johnny Porter, el protagonista, realiza un largo viaje, cambiando de medios de transporte y cruzando países y adoptando personalidades cambiantes a cada lugar y circunstancia, para contactar con un secreto laboratorio científico en Siberia desde donde se ha enviado un misterioso y fascinante mensaje.

Acceder a su interior, fuertemente vigilado y obtener información del científico que ha contactado y saber en qué se experimenta, es la misión que tiene encomendada. Una peligrosa acción de servicio secreto de espionaje.

Casi un McGuffin que permita narrar toda la fascinante odisea que debe superar el protagonista y explicar las relaciones que va construyendo, consolidando y destruyendo a lo largo de la misión.

Por suerte para él, Johnny Porter es un científico de matrícula capaz de desarrollar con éxito técnicas de supervivencia. Algo que parece una contradicción ya que no casan los arquetipos y sin embargo es lo menos sorprendente de todo el argumento.

Las peripecias que debe llevar a cabo requieren de todas sus habilidades, además de políglota necesita sus dotes de deportista, su capacidad de adaptación al medio y sus habilidades manuales.

Bajo los montes de Kolima es un potente thriller de espionaje, es una fascinante novela de aventuras y es una intensa y eterna historia de amor.

Lionel Davidson (1922 - 2009)
Lionel Davidson narra con tal minuciosidad y detalle que se diría que él ha sido el protagonista y no Johnny Porter de todas esas peripecias y que recogidas en un diario ha disfrazado de novela.

Pero ya tenga la proporción que tenga de imaginado, vivido en primera o tercera persona o visualizado a través de mapas y documentado de artículos  e imágenes del National Geographic, estamos ante una magnífica novela que permite experimentar un sinfín de sensaciones como muy pocas lo logran.

Y eso es mérito de un gran autor, lamentablemente fallecido.

No dejen escapar su lectura y prepárense para sentir y viajar como si vivieran una experiencia con gafas de realidad virtual.

viernes, 8 de septiembre de 2017

Crimen en el paraíso temporada 6


Agatha Christie en el Caribe.
Fiel a su cita veraniega, la serie que alterna paisaje tropical con asesinatos al estilo inglés más clásico, Agatha Christie en el Caribe, vuelve en su sexta temporada.

Crimen en el paraíso ofrece ocho nuevos episodios de corte policiaco clásico: asesinato de ejecución aparentemente imposible; pocos y escogidos sospechosos, interrogatorios, composición de lugar y una frase que dispara el clic mental del inspector Humphrey Goodman que le permite conocer el cómo y a partir de él descubrir el quién.

La detención sin aspavientos, sigue el paso previo de la explicación concedida en una escenificación juntando a su equipo policial con los sospechosos.

Muy Hércules Poirot aunque Humphrey sea inglés. Muy inglés y mucho inglés.

La serie se sustenta en el misterio que envuelve al crimen, en la intriga que conlleva descubrir el cómo, en el suspense de saber quién asesino y en el disfrute que supone el desenlace, de ahí que los cambios de  protagonistas, que han hundido otras series, no hagan mella en su permanencia.

Han consolidado el escenario, la estructura de la trama y ha mecanizado tan bien el modo de hacer hasta el punto que casi, solo casi, no importa quien lo haga, quien actúe. Aunque haya actores y actrices que estén mejor que otros en su papel y que caigan mejor o peor a la audiencia.

Hacia el final de esta 6ª temporada y debido a la investigación de un asesinato el equipo policial de Honoré se traslada a Londres para trabajar con Scotland Yard (primera vez en la serie que salen de la Isla de Saint Marie).

Florence Cassel y el nuevo inspector Jack Mooney
A esta novedad le sucede otra y es la substitución del inspector Humphrey Goodman por el nuevo inspector, inglés por supuestísimo, Jack Mooney (interpretado por Ardal O’Hanlon). Este papel cambia de manos por tercera vez, por lo que llamarlo novedad resulta inadecuado.

El nuevo inspector sigue fiel al estilo que los guionistas han definido para la serie, es buena persona, educado y tiene sus particularidades a la hora de enfocar la investigación. Este, además, ama el Caribe, lo ve como una oportunidad de salir de un estado depresivo en el que se veía envuelto, algo que sus predecesores no llevaban en el equipaje y siendo viudo como es lleva también en el equipaje a su hija Siobahn (interpretada por Grace Stone) que se preocupa por su estado de ánimo.

Serie placentera que da más de lo que parece y que entretiene más de lo que se pudiera imaginar. Sigue siendo un refrescante helado de colores y sabores para combatir el calor del estío.

Confirmada la 7ª temporada para el verano 2018

Lean aquí las reseñas de las anteriores temporadas:

1ª Temporada (con Richard Poole y Camille Bordey)
2ª Temporada (con Richard Poole y Camille Bordey)
3ª Temporada (con Humphrey Goodman y Camille Bordey)
4ª Temporada (con Humphrey Goodman, Camille Bordey y Florence Cassel)
5ª Temporada (con Humphrey Goodman y Florence Cassel)





domingo, 3 de septiembre de 2017

Un reloj por corazón de Peter Swanson

Chercher la femme encaja en esta
novela como un guante.
Negro y de medio brazo.
Cuando de alguien se dice que no tiene corazón no hay que asumir la literalidad de la afirmación, sino más bien interpretar que la persona en cuestión es proclive a no exteriorizar sus emociones y sentimientos; claro que es posible que no los tenga. Entonces además de, o en lugar de, ser persona, puede ser psicópata. Y cualquier cosa puede pasar.

No sabemos si el comportamiento de Liana Decter responde al de una mujer con una psicopatía o solo, ¡solo dice! al de una femme fatale; en cualquier caso el dicho chercher la femme encaja en esta novela como un guante. Negro y de medio brazo.

Un reloj por corazón es una novela que aborda un clásico de las novelas negras americanas de mediados del siglo pasado: chica conoce chico, chica engaña chico, chico sigue embelesado por chica y chica se aprovecha de chico. Porqué ya se sabe que los chicos ante una chica decidida y estupenda se encogen hasta quedarse chicos.

George Foss es el chico y Liana Decter es la chica. Claro que también hay más chicas: están Audrey Beck y Jane Byrne. Y por supuesto Irene Dimas, aunque esta pertenezca al presente junto con la detective de policía Roberta James.

George y Liana tienen en común su amor surgido alrededor de una cerveza en una fiesta de la Universidad y ahora, bastantes años después de haberse visto por última vez, van a tener en común el resolver una deuda. Pero no todo es tan fácil como saldarla y decir adiós: las cuentas pendientes con el tiempo se magnifican.

Un reloj por corazón es una novela negra que se desnuda lentamente, quitándose las transparencias del suspense para ir sugiriendo y desvelando y favorecer así una espera ansiosa por conocer lo que oculta. Llegar al final nunca había sido tan estimulante; claro que no a todos satisfará por igual.

La trama va pulsando las teclas de una melodía que no por anticiparla deja de resultar interesante. A ratos alterna pasado y presente lo que ralentiza y disminuye la tensión llegando a desconcertar en algunos momentos al no aportar nada relevante llegando incluso a parecer que el autor se ha perdido en sus disquisiciones. Ya se sabe: pecatta minuta de opera prima.

Peter Swanson
Peter Swanson ha escrito una novela más cinematográfica que literaria; midiendo los tiempos con el reloj, el mismo que ha empleado como corazón, para dar vida a un ser egoísta y perverso pero se ha olvidado decirnos si el reloj es de cuerda, mecánico o con batería: no sabemos hasta cuando indicará la hora.

Dejénse seducir por esa cubierta pulp y esos sorprendidos ojos de verde mirada; olvídense de lo que dice la estrategia comercial y no entren en creer las comparaciones.