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jueves, 22 de diciembre de 2022

Feliz Año Nuevo de Malin Stehn

La Noche de Fin de Año se ha vestido siempre como si de una distinta se tratara; dándole un significado hinchado de importancia y trascendencia.

Es la necesidad que tiene el ser humano de querer ser dominador del azar, de creer que puede gobernar el ingobernable destino. De creer que se puede llegar a controlar las fuerzas y que el año que viene será seguro, seguro, mejor que el anterior. Y espera que nadie le quite la ilusión.

La Noche de Fin de Año es noche de fiesta, de excesos, de libertad, de deseos; es noche de estreno: se estrena un nuevo año.

A lo máximo que se está dispuesto a aceptar a la mañana siguiente es un ligero dolor de cabeza, fácilmente controlable con un analgésico. Pero si lo que se sufre es la pérdida de una hija no hay medicamento que lo remedie.

Y de eso va esta novela que sobrecoge el corazón, el órgano más sensible a los sentimientos, de una hija que va de fiesta de fin de año en casa de una amiga y no regresa. Y no se sabe su paradero, ni si está viva o muerta.

Feliz Año Nuevo es un angustioso thriller noir que escoge familias de las de estar por casa para ponerlas en un brete, enfrentándolas a sus medias verdades, que agrieta relaciones de parejas dejando que secretos ocultos se filtren y provoquen que el año nuevo no sea un principio sino un final.

Malin Stehn va relatando a ritmo lento y pausado, centrándose en la psicología de cada personaje, pinchando donde más duele a cada cual, para conseguir que la desdicha y los reproches vayan calando hasta el punto de no retorno. Va complicando la vida de cada protagonista hasta que sus decisiones no responden a la razón sino al instinto de supervivencia.

Lo que evidencia que la amistad y la solidaridad forjada a lo largo de años puede ser solo una farsa, tal vez bien intencionada, pero que no resiste un trauma de gran calado.

Una lectura, que de leerla ahora, coincide en fechas. Lo que da un repelús a la celebración.

Una lectura que incita a preguntarse ¿cuánto sabemos de nuestras amistades? ¿Cuánto sabemos de nuestra pareja? ¿Cuánto sabemos de nuestras hijas y nuestros hijos?

Cuando levanten la copa para brindar por un Feliz Año Nuevo miren a los ojos de quienes les rodeen y no se hagan esas preguntas sino quieren tener por única compañía la soledad. 

domingo, 18 de diciembre de 2022

La hija ejemplar de Federico Axat

La perseverancia suele dar resultados aunque no siempre sean frutos, o si lo son no sean lo apetitosos que se desearía. La perseverancia es una aptitud que va a unida con la paciencia y la meticulosidad, y que no se encuentra a gusto con las prisas ni los desenfrenos.

La perseverancia forma parte del carácter de un periodista de investigación. Leer, analizar, indagar, documentarse, entrevistar tanta gente como sea preciso, todo para ir cribando arena en espera de encontrar una minúscula pepita de oro.

Camila Jones se dedica a eso, bueno se dedicaba ya que se ha retirado de todo y de todos, aborrece ser mediática, y ahora vive en una casa escaparate, vidrio por todas partes, con su perro Bobby en un lugar donde espera no ser reconocida.

Sin embargo, Tim Doherty, director del periódico local sí que la reconoce e intenta reclutarla para que le ayude a investigar la desaparición de una joven a quien la mayoría dan por muerta, justo cuando está a punto de cumplirse un año de los hechos y su recuerdo empieza a diluirse con el paso del tiempo.

Camila no resulta receptiva a la petición de forma inmediata, pero, ¡qué demonios! quien lo lleva en la sangre no puede cambiar de la noche al día y casi sin darse cuenta toma las riendas de un caso que otrora hubiera hecho furor cuando era una estrella de la televisión.

La trama va avanzando a ritmo de investigación amateur, no hay placa policial que abra puertas ni que suelte lenguas, pero los pasos son firmes y pronto la información obtenida va dibujando un escenario distinto al que se supuso en el momento de la desaparición asociada a suicidio.

La experiencia de Camila y la ayuda de antiguos colaboradores permiten encontrar indicios que o bien se pasaron por alto en su momento o, aún peor, no se quisieron contemplar para no desfigurar una idea preconcebida.

La hija ejemplar es una novela negra y oscura que va evolucionando a thriller apneico a medida que se acerca el final. Una intriga que se viste con sueños de adolescencia y del deseo de ser mayor para mostrar que hay que hacer caso del adagio que insiste en que hay que tener cuidado con lo que se desea…

Una trama que al final pasa cuentas sin ningún rubor ni atisbo de misericordia y que busca equilibrar la balanza con el mal sufrido.

Federico Axat va contando lo que pasó, lo que se supone que pasó y lo que está sucediendo.

Se toma su tiempo y su espacio, 518 páginas, para dar forma a un relato ominoso donde todos somos periodistas de investigación yendo de la mano de Camila, aprendices d'un oficio no exento de peligro.

No esperen una lectura de ritmo acelerado sino todo lo contrario, pausado y recogido y cuando finalicen no olviden que “la maldad se esconde donde menos lo esperas”.  

miércoles, 14 de diciembre de 2022

¿Quién es Olimpia Wimberly? De María Frisa

Un requiebro no es un quiebro repetido, y por muchos quiebros que contenga una novela no será más thriller. He visto jugadores de futbol encadenando quiebros y giros para acabar driblándose a sí mismos y perder la pelota.

A veces hay que buscar lo fácil y en ocasiones funciona. La navaja de Ockham sigue siendo un principio válido.

En ¿Quién es Olimpia Wimberly? Dicha navaja da a entender casi desde el principio lo que va a venir a continuación. Porque es lo lógico. Y por eso cuando se cumple el pronóstico, el castillo de naipes se desmorona.

Para confundir al lector hace falta poco, para sorprenderlo un poco más y para maravillarlo un mucho.

Por eso hay lecturas que deben reservarse para personas poco exigentes o poco duchas en materia criminal. Son lecturas fáciles que no necesitan ningún esfuerzo mental para seguir la trama, capítulos cortos y técnica Cliffhanger, con su emocioncilla, sus secretitos, su poquitin de sexo y tan ligeras como un telefilme.

María Frisa ha ido por lo fácil, buscando ese aspecto más lúdico que no sesudo y su obra es ágil y explicita como un mensaje publicitario. El argumento, la intención llega con facilidad y la empatía con el personaje principal se consigue sin esfuerzo.

Al componente detectivesco y de resolución de secuestros que ejerce un grupo de profesionales, excelentísimamente cualificados, le suma flash-backs del glamour de ese New York de los ’80 que todo el mundo hubiese deseado ver ni que fuera por un momento, ni que fuera por el ojo de la cerradura.

Y la trama combina la angustia de una investigación que bucea tópicamente en el pasado de la protagonista, Olimpia Wimberly, con un presente de sofisticados componentes informáticos que acuden como soporte técnico para analizar pistas que la ayuden a interpretar emociones y recuerdos.

En materia de rescate, los lugares son nidos y las personas no son objetivos, son huevos. Huevos que se encuentra fuera de su hábitat, como los huevos de cuco depositados en nido ajeno, empollados por un sentimiento sobre el que la biología no puede incidir.

La novela es una suma de sentimientos en un trasiego constante de pasado a presente y viceversa. Cambia el momento, el lugar y las personas pero no lo que son: emociones envueltas en cuerpos humanos.

lunes, 5 de diciembre de 2022

Lejos de Rosa Ribas

Los espacios abiertos pueden llegar a marear; a producir vértigo por la falta de referencias geoposicionales. Las novelas que transcurren en esos espacios producen el mismo efecto. Suscitan desapego y quien lee se encuentra perdido en un mundo, en un viaje, que no sabe lo que le deparará.

Lejos es una novela que hace del desapego su paradójica razón para seguir viviendo y lo hace parasitando a tres personajes que son su proyección en el plano físico.

Pocos nombres propios nos ofrece la autora y solo de quienes no los necesitan porque su comportamiento y sus razonamientos irracionales son identificables en cualquier comunidad aun cuando no tengan filiación.

Personajes, estereotipos sociales, que esconden su frustración, sus insatisfacciones y sus miedos bajo normas de comportamiento social en las que no se cree pero que se aceptan porqué se necesitan referencias y límites.

Se autoproclaman policías de la moral y se adhieren a la pertenencia de grupo como salvaguarda de la supervivencia y no toleran que nadie salga del rebaño: si yo no disfruto no te permito que tú lo hagas. Perros de hortelano.

Paisaje y paisanaje a juego. Despojos de obra sin acabar y despojos humanos, pero mientras los primeros, si pudieran sentir, saben lo que son, los segundos se engañan para que su sueño permanezca inalterable lo más alejado de la realidad posible.

La vida en un proyecto de urbanización inconclusa, no permite, por su propia precaria condición, que nadie se realice como persona y que el deseo de huir se aborte en los lindes de la zona parcelada, porque el sueño permanece allí y solo allí puede ser que tal vez algún día se cumpla. Por eso el regreso del constructor se espera como el de un mesías que les confirme que la fe tiene premio.

Los protagonistas principales tampoco tienen nombre, pero tienen en común el estigma del rechazo social y las ganas de vivir. Y la creencia de que más allá de las nubes oscuras y alienantes alimentadas por la sordidez, pueda existir un arco iris, probablemente desdibujado y desteñido pues a estas alturas ya no se creen en cuentos de hadas, siempre será más agradecido que continuar en un paisaje de escombros protegidos por alambradas.

Rosa Ribas se atreve a piruetear con esta novela que sustituye párrafos por sinsabores y palabras por vacíos existenciales. Una novela negra inclasificable, ya que etiquetar Lejos es no entenderla.

A Lejos hay que acercarse sabiendo que no se la puede abarcar, sabiendo que para volar lejos hacen falta alas y un cielo libre de obstáculos y sabiendo que parecería que solo la muerte puede satisfacer ambas necesidades

 

 

domingo, 20 de noviembre de 2022

La raíz del mal de Håkan Nesser

¿Cómo andarían muchas novelas negras sin apoyarse en el bastón del pasado? Cojas, lentamente, dubitativamente. El pasado es universal, lo tienen todos los seres inanimados y todos los seres animados, aunque probablemente solo sea el pasado de las personas el que se pueda recordar de forma plenamente consciente y el único capaz de condicionar el efímero presente y decidir el destino del futuro.

En La raíz del mal queda claro que éste, el mal, si tiene raíz es porque lleva tiempo plantado y sus frutos aunque interesantes por ser asesinatos no lo son tanto como conocer su raíz ya que es la que va a identificar al culpable de esos amargos frutos.

La novela, por nórdica, no todas pero si la mayoría, adolece del mal del peso y no le hubiera ido mal una dieta. Las dietas son ideales para eliminar lo sobrante y dejar lo magro sin llegar a pinchar en hueso.

Håkan Nesser descubre su argumento en las primeras páginas, queda claro quiénes serán las víctimas y pronto el porqué. Este planteamiento que reduce el suspense a cuándo y cómo, es valiente. Pero precisa de un gran esfuerzo lector para seguir manteniendo la atención y a todo esfuerzo le sucede un cansancio que si llega antes de lo previsto puede echar al traste el planteamiento al no conseguir alcanzar el objetivo.

El autor recurre a un prolífico relato de las emociones del inspector, de sus recurrentes comidas y vacuos pensamientos; de su proyecto amoroso, felicidad no exenta de dudas, como recambio a su soledad y de sus dudosas aptitudes como padre, para mantener el hilo narrativo ante la más que evidente endeblez del argumento criminal, pero solo consigue que se hundan ambos. Demasiado peso para tan endeble barca.

El final, un plot twist que no consigue el descoloque pretendido si acaso un atisbo de sorpresa mostrado en un levantamiento de cejas, es precipitado y poco concreto y confirma la impresión, que desde el inicio ha ido acompañando la lectura, de que el libro no sabía a qué atenerse.

Segunda entrega del inspector Barbarotti, cuya edición original es de 2007 y aquí acaba de llegar y tal vez esos 15 años pesan lo suyo al mostrarse un desarrollo argumental antiguo y carente de tensión y suspense y que seguramente en aquel momento encajaba con lo que demandaba el mercado pero que hoy, con el amplio abanico de ofertas sobre la mesa de novedades, sin duda queda desfasado.

Un inspector Barbarotti que aparece sobrepasado por todo lo que le rodea. Tanto sus compañeros en la comisaria, como su pareja sentimental, su ex-mujer, sus hijos y su psicóloga se comen la pantalla en las escenas en las que aparecen y a él no le queda ni el triste consuelo de ser el protagonista en la resolución del caso. Una lectura excesiva de sabor agridulce.

domingo, 6 de noviembre de 2022

Yo no soy Hércules Poirot de Javier Cosnava y Teresa Ortiz-Tagle

El mundo de los homenajes y pastiches está lleno de buenas intenciones y no tan buenos resultados. Quienes se dedican al mundo de la imitación saben que el secreto está en identificar y evidenciar los pequeños detalles sin pasarse de frenada.

Quienes quieran aventurarse por ese camino de la suplantación consentida deberían leer y aprender de esta novela: Yo no soy Hércules Poirot.

Un brillante ejercicio de metaliteratura que se atreve a combinar la ficción y la realidad y que ofrece un repertorio de interesantísimos guiños, adecuando los tonos de voz y los comportamientos para conseguir una obra redonda dentro de lo que se conoce como novela enigma.

Agatha Christie y su obra y su personaje Hércules Poirot participan de una de sus tramas clásicas de crimen en entorno cerrado. Aunque no sea en una habitación sino en una pequeña urbanización y a pesar de que el investigador siendo un detective belga, no sea el orondo Hércules Poirot sino Héracles Amadeus Polrot.

Un apunte conveniente, tal vez innecesario, sea el mencionar que Hércules y Héracles son la misma persona solo que nombrados en latín y griego clásico respectivamente y hacen referencia a un héroe, que no dios, de la mitología griega.

Héracles Polrot ha sido contratado por John Rider, un enfermo terminal, para que descubra que sucedió hace dos años con la desaparición de su hija Lily, de 8 años de edad, mientras vivían en la urbanización Styles Mansions.

Allí coincidirá con Miranda Hartings que ve en él a su héroe literario de incognito y que no duda que el destino lo ha puesto en su camino, ella será su Hastings, para ayudarlo a resolver un caso que desequilibró la armonía vecinal.


Javier Cosnava y Teresa Ortiz-Tagle
han escrito esta novela de apariencia sencilla y que resulta ser una maravilla que encantaría a la mismísima Dama del Crimen y satisfará a todas las personas que la tienen en un altar.

Y es que han conseguido recrear no solo la atmósfera propia del género, que tan bien cultivó la escritora inglesa, sino homenajearla mimetizando sus tics narrativos, su estructura argumental y su desarrollo de la trama sin olvidar ese final, monologo teatral con los sospechosos como convidados de piedra, seña de identidad de Hércules Poirot que copia a la perfección Héracles Polrot.

Huelga decir que quien ame la obra de Agatha Christie debe ineludiblemente leer esta joyita Yo no soy Hércules Poirot, una novela policiaca canónica.

Esta novela es un prometedor inicio de la serie Los casos de Héracles y Agatha que ya cuenta con una segunda entrega titulada Yo no soy Agatha y no puedo resistir tanta curiosidad. Por suerte no soy un gato.

martes, 1 de noviembre de 2022

¿Qué ocurrió en Undiano? de Yolanda Almeida

María Garmendia, la vocalista de una banda de música, yace muerta con veinte puñaladas perforando su cuerpo.

María Garmendia, cantante, amiga, novia y a su tiempo carne de cañón en las redes sociales.

Puy, Amaia y David están culpabilizando a la muerta de su muerte, sacándose los ojos entre los tres buscando exculparse de cualquier responsabilidad a costa de achacarla a quien esté más cerca.

Se confunden con el avatar que navega por las redes y rehúyen la implicación personal por la comodidad que supone un clic impersonal a distancia.

Pero en la vida las cosas no se resuelven con un clic pero si pueden empeorar. Tampoco el estado de ánimo cambia con un like pero puede ayudar. Vivir tanto tiempo en la red impide madurar con consciencia en la vida real.

Undiano no es solo un lugar, es un estado de ánimo. Es la conexión inconsciente de la suma de frustraciones, envidias, recelos y odios.

En ¿Qué ocurrió en Undiano?, Yolanda Almeida desnuda a las personas de su apariencia para mostrar su yo interior. El nic sirve para el mundo virtual pero es un yo alternativo que nunca hay que confundir con el yo real.  

¿Qué ocurrió en Undiano? Es un libreto teatral de contenido orgánico y a la vez cerebral, una obra breve con tres protagonistas despreciables, por múltiples razones, que impele a ser leído hasta el final, como el visionado de su representación en escena. 

Los cambios de registro que sufren las tres personalidades a lo largo de la obra indica la lucha interior de su yo primitivo ante la necesidad de mostrarse frente al razonamiento de que la exposición suponga vulnerabilidad.

Es una catarsis colectiva, un ejercicio de introspección proyectada hacia el espectador que busca su complicidad en un acto criminal, porque, al fin y al cabo, aplicando una falacia, todos somos culpables puesto que todos estamos en una o varias redes sociales y la autoestima de muchos está directamente relacionada con su éxito.

Y como con toda obra de teatro que incita a la reflexión, y más en este caso por su componente noir de denuncia de esas herramientas que en manos equivocadas se convierten en fusiles de francotirador, su naturaleza humana se verá agitada tras su lectura o su visionado. No se quejen, ¿es lo que habían venido a buscar, no?

Yolanda Almeida es una escritora de distancias cortas como ya demostró, sobradamente, con el relato noir La cuarentona y también en su anterior obra teatral La sombra

viernes, 28 de octubre de 2022

Riccardino de Andrea Camilleri

Estamos ante la última aparición literaria de Salvo Montalbano, el Comisario de Vigàta en la isleña Sicilia.

A lo largo de 33 novelas, Camilleri ha ido construyendo un personaje que ha conseguido ser entrañable por su humanidad y falibilidad, en especial en sus asuntos amorosos. Sus comidas, sus paseos junto al mar y sus reflexiones en voz alta, han conformado un personaje, un atrezo y un decorado que, aun sabiéndolo ficción nos seguimos resistiendo a creer que no sea realidad.

En Riccardino, Camilleri, que de esto del teatro sabe mucho, nos ha permitido asistir a una obra teatral y como no podía romper la cuarta pared para todos, al final se ha decidido a romperla para él.

Y con ello Camilleri se ha transmutado en Pirandello, y si éste en su obra teatral más famosa, Seis personajes en busca de autor, exhortaba a reflexionar sobre el concepto de la identidad humana a partir de la confusión entre actores y personajes, Camilleri lo ha reducido a un solo personaje pero manteniendo el hilo traumático de la trama.

Así Salvo Montalbano dialoga con el autor, Camilleri por supuesto, y se enfada porqué lo comparen con el Montalbano de la serie de televisión, a quien considera que no se le parece en nada, y con el Montalbano literario a quien todo parece lloverle del cielo para resolver todos los casos criminales a los que se enfrenta.

Él es el Montalbano real y los otros dos son ficción y él decide cómo, cuándo y dónde actuar; cómo llevar sus investigaciones y cómo resolver sus casos, por mucho que el autor se empeñe en insistir de su condición de personaje de ficción.

En este clima de tesitura filosófica, de conflicto existencial, se desenvuelve un caso criminal que se apoya en aquello en lo que no debería y es en la suma de casualidades.

Riccardino muere asesinado por disparos a quemarropa y averiguar los motivos casi resulta más interesante que conocer al culpable, pero aún y así la trama se resiste a fluir y el artificio de obra teatral demuestra que, al menos esta vez, el fin puede justificar los medios pero no que estos hayan sido los acertados.

El caso apenas se instruye y la investigación, en dos tiempos, está mal llevada por un Montalbano cansado y hastiado de todo. Además se ve cuestionada por los medios informativos, entorpecida por su jefe, influenciada por un obispo y recriminada por el autor que no para de entrometerse,

La Nota del Autor al final de la novela debería bastar para alejar la curiosidad y pasar de largo. Camilleri explica como la obra fue escrita entre 2004 y 2005, cuando el autor rondaba los 80 años de edad y quería dejar cerrada la trayectoria de Montalbano ante cualquier imprevisto. Viendo que pasaba el tiempo y seguía activo, retomó el texto en 2016 para adecuarlo en lenguaje y se acabó publicando póstumamente en 2020.

Desde aquel 2005 Montalbano ha vivido mucho, casi 20 novelas, y el mundo ha seguido en su vaivén incesable; aspectos que no se reflejan adecuadamente en Riccardino que, buscando la atemporalidad, se desenvuelve en una neutralidad carente de atractivo e interés ya que no se compromete en nada relevante a nivel social ni tampoco a nivel personal y amoroso del protagonista.

Qué suerte haber leído a Camilleri y haber conocido a Montalbano, pero no de acercarme a esta última y póstuma obra. Ni Camilleri ni Montalbano ni los lectores merecían este final.

domingo, 23 de octubre de 2022

El pasado nunca nos olvida de Daniel Jerez

El pasado siempre está ahí para recordarnos quienes somos y de dónde venimos. El pasado es ese conocido pesado que no nos permite pasar página. Esa sombra pegada al cuerpo que se arrastra por el suelo o por las paredes pero que nunca, nunca, nos suelta.

Hay pasados satisfactorios que se recuerdan con agradecimiento, hay pasados molestos que cuanto más se intentan olvidar más presentes están. Y hay pasados ominosos y cruentos que no se quiere que nadie más sepa.

En un pasado no muy lejano, en 1940, un vuelo acrobático de exhibición de un caza alemán, un Messerschmitt acaba en tragedia. El aparato no levanta el vuelo en un picado y se estrella en un suelo de marismas formado por fango y aguas subterráneas, que rodea el aeropuerto barcelonés en El Prat de Llobregat. Y permítanme el chascarrillo pero viene al pelo: …y de aquellos barros, estos lodos…

Hoy, noviembre de 2002, más de sesenta años después y una vez ubicado el lugar se procede a su recuperación. Nadie sospecha que con la extracción de los restos del aparato va a aparecer también algo imprevisto que, como tópica caja de Pandora, va a desatar un piélago de calamidades que van a ir encajando en una suerte de investigación periodística que Sebastián Acosta va a llevar a cabo.

Sebastián va a ir avanzando por ese terreno pantanoso que ya no solo es físico sino que afecta también a emociones y sentimientos y su relación con la familia, las amistades, colegas del trabajo y fantasmas del pasado, literalmente.

Deberíamos conocer mejor el lugar que nos ha visto nacer y crecer, así conociendo el pasado, el presente se presentaría con más nitidez. Pero un espejo con el azogue manchado y quebrado solo es capaz de ofrecer un reflejo sesgado de la realidad y Sebastián constata que es en uno así donde se ha estado mirando todo el tiempo.

Daniel Jerez, el autor, ha integrado El Prat de Llobregat en una trama criminal hasta el punto de que sin la población la novela no sería lo mismo. Sus localizaciones resultan determinantes, por su vivida descripción, para entender cómo fue posible que el delito se diera y por eso juega el papel de figurante con texto.

El pasado nunca nos olvida contiene una historia contada con los recursos del thriller: atmósfera de peligro latente, situaciones inquietantes, tensión emocional introspectiva y proyectada, una investigación que va desvelando poco a poco pero que permite al lector ir ligeramente por delante del protagonista principal y un desenlace inesperado.

Y a su vez El pasado nunca nos olvida es una novela negra que destapa actos viles producto de una ambición desmedida en una trama de corrupción y poder opresor.

Si hay alguien del Prat de Llobregat en la sala, esta novela es de lectura obligatoria y si no, también.

domingo, 16 de octubre de 2022

Los príncipes de Sambalpur de Abir Mukherjee

El año pasado nos regaló el descubrimiento de la primera novela de una serie ambientada en la India colonial británico, escrita por Abir Mukherjee, un autor de origen indio criado en Escocia, titulada El hombre de Calcuta

Ya son cinco los títulos publicados y aquí ya están disponibles y traducidos dos, el primero El hombre de Calcuta (hagan clic sobre el nombre para acceder a la reseña) y el segundo, este que hoy presento con entusiasmo, Los príncipes de Sambalpur.

Si en el primero se nos introdujo en una época de un país peculiar, confuso, ruidoso, caótico y especiado como es la India colonial británica, en este segundo ahondamos no solo en el conocimiento de sus costumbres sino también en su particular sistema de castas y de gobiernos autónomos y líneas de sucesión. Algo tan ancestral que ni los británicos osaban inmiscuirse.

El capitán Sam Wyndhman, que ha ido tomando el pulso a esta civilización, y su sargento Banerjee, o Surrender-not como suele ser apelado, acaban de escaparse de una soporífera recepción oficial junto a un príncipe heredero de un estado soberano cuando, víctimas de una emboscada, son tiroteados con resultado de muerte para el joven príncipe Adhir Singh Sai.

El exitoso atentado levanta polvareda en el seno del gobierno británico que insta a Wyndhman i a Surrender-not a no descansar hasta encontrar al asesino habida cuenta que el ataque puede complicar una estrategia gubernamental que consiste en la creación de un organismo denominado Cámara de los Príncipes donde los susodichos puedan hacer oír su voz aunque tengan cautivo el voto. Gran Bretaña está dispuesta a aparentar intención de diálogo para que el Partido del Congreso, ese que abandera un tal Gandhi, no aumente su influencia e incite a los nativos a la insurrección.

En ese estado de tensión, la muerte de uno de los candidatos a integrar la Cámara no solo no ayuda sino que desluce el efecto pretendido, de ahí que el comisario Lord Taggart, jefe directo del capitán y del sargento, presione a sus hombres para resolver el caso y apaciguar al virrey.

Abir Mukherjee sigue, en esta nueva entrega, los pasos de la primera de la serie y mejora incluso algunos aspectos, profundizando ironicamente sobre los atributos del imperio britanico y su falta de criterio para tratar asuntos espinosos al estar siempre más pendientes de la etiqueta y el protocolo que de los problemas de fondo. Así les fue.

El caso criminal está muy bien planificado y mejor resuelto, tanto por su trama y desenlace como por su escritura. Los motivos que inducen al asesinato, la mano ejecutora, el momento elegido incluso el método resulta todo de lo más convincente y su presentación es digna de la mejor mesa.

Si la primera lectura ya resultó satisfactoria, ésta aún lo es más. No hay duda que estamos delante de una magnifica serie que promete mucha emoción e intriga acompañadas de especias picantes que aún excitan más las papilas gustativas. Quedan ganas de más y larga espera parece antojarse si van a traducción por año.

Léanlas rápido a ver si desde la editorial entienden que no deben demorar las entregas.

domingo, 9 de octubre de 2022

Mai Més de Susana Hernández

Sortir, o millor escapar, de la marginalitat no és un desig sinó una necessitat. Viure en un mal barri, estigmatitza. Ho diu el vell aixecant al bastó contra els periodistes: “només veniu quan hi ha escàndol...” i és que fora de la noticia llaminera i morbosa captadora d’audiència, el barri no importa a ningú i a vegades ni tant sols els qui hi viuen.

A la Mina, al Besós, hi ha moguda de pisos de narcotràfic davant una batuda policial i cal moure els caus a nous llocs. Aquesta moguda afecta de retruc la vida de molta gent com la Rosa, el Biel, la Laila, la Hanifa, l’Anwar, la Jeny, el Musta... que intenten mal sobreviure com plantes en un femer.

Mai més és el crit d'un d'ells però que podria ser-ho de qualsevol.

Algunes plantes delicades i de colors vius aspiren a captivar l’atenció de la cara més agraïda i compensatòria de la vida; altres es cargolen sobre si mateixes oferint una imatge esquerpa a la defensiva, com cactus a punt de punxar si algú s’apropa massa.

Europeus, africans, asiàtics... autòctons, marroquins, pakistanesos... en els barris marginals totes les nacionalitats passen la mateixa gana però estructurats com països en miniatura estableixen les seves fronteres i decideixen les relacions amb les altres comunitats i no dubten a lluitar a sang per defensar el, poc, que tenen.

La Susana Hernández relata un episodi que forma part del dia a dia de determinats habitats que els tenim a tocar i en canvi semblen molt llunyans. Habitats d’aquells que només surten a les noticies si hi ha sang, com diu el vell del bastó.

Amb aquesta novel·la negra de barri, novel·la negra social, demostra que el que representa el gènere negre de retrat, exposició i reivindicació el tenim a tocar i no cal un argument ple d’escarafalls per mostrar que la violència no és potestat de psicòpates i que perfectament pot ser filla de les circumstàncies.

No som com ells” diu en un moment la Laila, però no hi ha volta enrere doncs a vegades la força de l’aigua t’arrossega encara que no vulguis i creguis que amb tu no podrà.

La lectura de Mai Més es de les que fa regirar en la cadira, és incomoda, desestabilitzadora, colpidora, inquietant.

D’aquelles que t’evidencien que, en tota població més o menys gran, hi ha un barri marginal i que en ell, a diari, es planten les mateixes frustracions i il·lusions i que es recol·lecta el malviure com constant quotidiana.

És el que és el que provoca que les coses siguin com son; a vegades no es pot escollir entre el bo y el dolent, sinó entre el dolent i el pitjor. Si han tingut un mal dia a la feina, a l’escola o rodalies ha tornat a petar i pensen que tenen mala sort, llegeixin aquesta novel·la i els canviarà la perspectiva.

Les obres de Susana Hernández sempre van acompanyades d’un mirall per tal d’anar aixecant el cap durant la lectura i poder veure’ns i fer-nos reflexionar. 

domingo, 2 de octubre de 2022

Robo en Sao Paulo de Dulce Xerach

María Anchieta acaba de ser nombrada guardaespaldas circunstancial del Presidente de Canarias en un viaje oficial a Sao Paulo con motivo de la celebración del 450 aniversario de la fundación de la ciudad por un jesuita tinerfeño.

Entre los actos está la inauguración de una exposición donde se muestra un manuscrito del propio padre Anchieta de inestimable valor cedido por el Vaticano para tan magna ocasión.

Sí, han leído bien María Anchieta y padre Anchieta pero no, no tienen parentesco alguno; o si, que la genealogía ofrece muchos misterios. De momento dejémoslo en casualidad, aunque es bien sabido que las casualidades, en novela negra y policiaca, no existen.

Cuando el manuscrito desaparece en lo que parece un audaz robo, un inconveniente contratiempo para la delegación española y las autoridades locales, la policía brasileña, la española y la guardia del Vaticano trenzan una alianza para su recuperación.

Así empieza este thriller de Dulce Xerach que, fiel a la etiqueta, presenta dinamismo, traslados, largos recorridos y distintas ubicaciones donde ir sembrando las pistas que han de permitir ir atando cabos en una investigación compleja por estar mediatizada por poderes religiosos y especialmente políticos.

La inspectora María Anchieta aunque sea del norte peninsular, tiene también lazos en Brasil y en Tenerife, donde ejerce actualmente. Por lo que las circunstancias no podían haber elegido a mejor investigadora.

Además su facilidad por el liderazgo la aúpa a tomar las riendas del grupo a pesar de estar pasando unos momentos personales de bajón. La autora le presta tics que provocan unas reacciones y unos comportamientos muy propios en una mujer lo que conforma un personaje muy creíble y humanamente cercano.

Robo en Sao Paulo es un thriller que busca la línea recta, que evita la confusión y facilita la lectura, como tiene que ser en beneficio del ritmo y el suspense.

La edición digital que he podido leer, al liberarla la autora puntualmente, presenta, en el último tercio, faltas de corrección probablemente por no ser la definitiva, lo que no impide disfrutar de su lectura.

Robo en Sao Paulo es la primera de una serie que ya va por la cuarta entrega, y que si en esta primera ya mostraba nivel, es de suponer que las siguientes aún serán mejores. Habrá que ir haciéndoles un hueco.

sábado, 1 de octubre de 2022

Podcast: El Mussol Maltès 01


El Mussol Maltès 01

01x01 - Librería Negra y Criminal (I)

La librería Negra y Criminal de Barcelona, un referente mundial y principal punto de encuentro de todas las personas interesadas en el género negro y criminal.


  • Pueden oírlo en Spotify


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domingo, 25 de septiembre de 2022

El Gran Detective Byron Mitchell de Manuel Martín Ferreras

Hay novelas en las que el titulo no deja entrever la historia y otros en las que lo proclama. En esta, Manuel Martín Ferreras, el autor, ha elegido airear al protagonista de su historia a modo y manera de cómo se anunciaban en épocas pretéritas espectáculos circenses o grandes estrellas de las bambalinas o de las artes del ilusionismo: El Gran…

Lo cual significa jugar con las cartas sobre la mesa: estamos ante una gloriosa aventura de un grande de la investigación criminal. Nada por aquí, nada por allá, y aparece Byron Mitchell, El Gran Detective que ha encandilado a toda Europa, lanzado a resolver un intricado caso no exento de misterios y complicaciones.

Byron Mitchell, vive de alquiler en la mansión de unos burgueses catalanes en la Barcelona que se afana por salir del siglo XIX con curiosidad por entrar en el XX, donde ha recalado en un periplo no finalizado.

Y por atención a la familia debe aceptar llevar a cabo una investigación, su fama le ha precedido a pesar de haber proclamado a los cuatro vientos que está retirado, que limpie el nombre del patriarca que parece en entredicho al hallarse el cadáver de quien fuera uno de sus abogados.

La época, 1901, condiciona una investigación donde el ir de un sitio a otro y hacer muchas preguntas es el método. No hay tecnología, y si pocos medios y mucha voluntad.

Byron se topará con enemigos y aliados al tiempo que deber sortear a la policía, nada contenta de tenerle metiendo las narices en un asunto que es exclusivo de su negociado.

El costumbrismo de la época refleja una ciudad que en 1901, en pleno esplendor del modernismo como corriente artística, a nivel urbanístico se está construyendo a sí misma y aún no conoce sus posibilidades y a nivel social, delimita claramente la posición de cada cual según su estatus. Y Byron, un extranjero, aún está acostumbrándose a ciertas normas y comportamientos.

El Gran Detective Byron Mitchell es una apasionante historia de detectives de la vieja escuela con mucha interacción entre personajes, mucho movimiento y trasiego, y una trama lo suficientemente compleja para no dejar entrever sus intenciones, y con un final muy intrigante y a la vez revelador.

Manuel Martín Ferreras ha construido en Byron Mitchell un arquetipo de detective barcelonés, de adopción pero como si no, destinado a dar muchas alegrías a los lectores de la novela policiaca de época con ribetes folletinescos.

Un argumento, donde las relaciones humanas tienen mucho peso, que a la par que se va revelando la trama se descubre la personalidad de un Byron Mitchell que, como es de esperar en un gran detective, tiene sus propios misterios por aclarar.

No sé qué pensarán ustedes cuando finalicen la lectura pero yo estoy esperando ya la segunda entrega.

domingo, 18 de septiembre de 2022

Una herencia en juego de Jennifer Lynn Barnes

Estamos ante una novela protagonizada por adolescentes y dirigida a ese grupo de personas lectoras, pero que puede entretener a mayores si no hay mucha pretensión.

Un divertido relato en el que suceden misterios, acertijos y pasadizos secretos en una mansión en la que perderse es lo mínimo que te puede pasar.

Está en juego una herencia astronómica y hay tantas personas interesadas en obtenerla que todo se va a ir complicando hasta alcanzar nivel intento de asesinato, con lo que la trama adquiere una nueva dimensión.

Abogados, familiares del lado heredero y del lado desheredado, intereses comerciales, una fundación, una mansión repleta de habitaciones, personal de servicio para atender cualquier necesidad, más coches que en un concesionario y un instituto para alumnado de clases selectas se dan cita en un argumento ingenioso y muy sensibilizado con las inquietudes del público a quien se dirige la lectura.

Es como si el ambiente, y solo el ambiente, de Los Cinco, se hubiese adaptado a los nuevos tiempos para elaborar una aventura donde no se escatiman ninguno de los elementos que conforman la realidad actual: redes sociales, internet y primeros amores; elementos afines que se precisan para mantener la atención y el interés de los jóvenes lectores por corresponder a su día a día.

Jennifer Lynn Barnes consigue que Una herencia en juego sea un divertimento repleto de aventuras manteniendo el trasfondo de denuncia social hacia la individualidad, el egoísmo, la avaricia y la soberbia. Pero no lo hace desde una escritura condescendiente para su público sino de forma adulta y con perspectiva de género, como debe ser al no tratarse de un cuento.

Poco más se puede decir para no anticipar nada de lo mucho que sucede; es preferible que se acerquen a su lectura con cuanta menos información mejor.

Si tienen a algún o alguna adolescente cerca con ganas de leer, que se atrevan con esta novela y seguro que no la sueltan hasta el final y estarán de suerte porque aunque la novela es auto conclusiva, resulta ser la primera de una trilogía a la que la siguen El Legado de Hawthorne (ya se está anunciando en librerías) y El Gambito Final.

 

miércoles, 14 de septiembre de 2022

Las agujas de la noche de Fernando Repiso

La perfección es subjetiva y por tanto no existe, ni quienes ejercen de policías la ostentan, por eso no hay que sobrevalorar esa condición y si, en cambio, meritar quienes sin aspirar a ella, incluso rechazándola, se comprometen con su responsabilidad hasta el final. Como si, sin saberlo, la persiguieran.

Iván de Pablos, inspector de policía, es un vivo ejemplo de esa dicotomía: es lo más alejado a lo que se podría entender académicamente como perfecto, lo más politicamente incorrecto, y sin embargo es un perfeccionista en su trabajo.

Adicto a diversas substancias legales e ilegales, y al sexo satisfactorio y compensatorio alejado de compromisos, debe resolver un caso que le toca de cerca ya que la víctima es un joven con cuyo marido, Iván había mantenido una relación sentimental que solo necesita una ligera chispa para prender de nuevo.

El cadáver se ha encontrado en un reservado de una sauna muy frecuentada, incluso por el mismo Iván, con la puerta cerrada por dentro. El asunto se presenta confuso y turbio y aún va a ir a más.

Pero para nada estamos ante una novela policiaca del género enigma con habitación cerrada. Las agujas de la noche es una novela negra atrevida, descarada y, si me permiten, muy necesaria en el panorama editorial actual, al que parece costarle salir de su zona de confort y apostar por iniciativas, como ésta, más arriesgadas y transgresoras.

Y es que el inspector Iván de Pablos, por si fuera poco su estilo de vida exageradamente desordenado y cortoplacista, es homosexual. Y el coctel resultante dibujan una personalidad que no acaba de ser bien vista entre sus compañeros, que si bastante hay con aceptar mujeres en el cuerpo solo faltan ahora los maricas.

La trama se desenvuelve a ratos más acelerada y otros más contemplativa, normal siendo quien la conduce alguien que tan pronto está bajo los efectos de una substancia espitosa como de otra relajante. Y eso acentúa su interés ya que así se concibe mejor como de estresada funciona la mente del inspector por si no tuviera bastante presión en el cuerpo, el suyo y el de policía, y con su círculo de amistades, su hijo adolescente, su exmujer y el marido de ésta que por más inri es el forense.

Julia, una inspectora catalana que ha recalado en Sevilla, es su compañera en este caso, y es de desear que en muchos otros, y aporta un contrapunto de frescura que equilibra el nivel de paranoia casi autodestructiva al que se podría llegar siguiendo a Iván a ciegas.

Una crítica a la homofobia, una sátira a la condescendencia con la que los políticos pretenden la foto y el voto, y una exposición al gran público de una realidad que para muchos aún resulta ofensiva e insultante pero que ahí está.

Fernando Repiso presenta una obra que, en una sociedad evolucionada, no debería escandalizar a nadie pero sobre la que mucha gente tendrá sus reservas: déjense de mojigatadas porqué si no la leen se van a perder una intensa novela negra.

“Nadie es perfecto”, le dice Osgood Fielding III a Jerry con lo que se cierra una gran comedia del cine como es Con faldas y a lo loco (Some Like it Hot), con un mensaje de lo más inclusivo y aprovecho para compartirlo y para cerrar también está reseña.

 

lunes, 12 de septiembre de 2022

El Mussol Maltès de Jordi Valero


Este 7 de septiembre de 2022 se ha emitido el primer programa de El Mussol Maltès en Radio Sabadell 94.6 una emisora con 90 años de historia y que se reinventó hace 20.

El Mussol Maltès, cuyo título rinde merecido homenaje a la novela y la película El Halcón Maltès, es una desordenada colección de fascículos auditivos sobre el mundo Noir en todas sus manifestaciones: literatura, cine, comic, teatro, gastronomía, moda, etc. Todo mezclado pero no agitado.

Historia e historias del mundo noir narradas en forma de relato punteado por cortes musicales que comparten cuerpo argumental.

Es un programa breve, entre 27 y 29 minutos o sea que permite ser escuchado con tranquilidad mientras cada cual hace sus cosas: andar, pasear al perro, hacer deporte, viajar, cocinar, esperar la vez, planchar, regar las plantas, hacer el vermú…

Y es mensual, con lo que no hay agobios ni urgencias. Si un mes tiene 43.200 minutos, ¿a ver si no se pueden dedicar 27 o 28 de ellos a escucharlo?

Y se emite en Radio Sabadell 94.6, el primer miércoles de cada mes a las 20:30 y, también en redifusión y queda accesible en la pestaña de programas de su web para ser escuchado a conveniencia; y también está disponible en las mejores plataformas de podcast como Apple Podcast, Ivoox, Spotify y otras más.

Y gratis. Nadie da tanto por nada. Suscríbanse a su plataforma de podcast preferida y recibirán una notificación cada mes cuando haya uno nuevo; sin excusa para no perderse ninguno.

Espero que les sorprenda y guste por igual, escuchen el primer fascículo: El Mussol Maltès 01 – Negra i Criminal (I) y que ustedes lo maten bien.

En catalán (y también en plataformas podcast)

https://radiosabadell.fm/podcasts?field_programa=30376

En castellano, en varias plataformas de podcast como:

Spotify  https://open.spotify.com/show/6xK0qKoJrcYK8JcMivHdTt

Ivoxx https://www.ivoox.com/el-mussol-maltes_sb.html?sb=el+mussol+maltes


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