martes, 9 de septiembre de 2025

Esvástica de hielo de Fernando de Cea Velasco

En las guerras está claro que hay que protegerse del enemigo, ese que no dudará en matarte si puede, pero no hay que dejar de vigilar al amigo circunstancial, ese que no has buscado, que te lo ha propiciado la situación y se ha unido por la desgracia, y que puede que no sea tan amigo.

Obras como esta, Esvástica de Hielo, que relatan posibilidades como si fueran verdades, que presentan escenarios ficticios que nada envidian a la realidad que subyace entre líneas, son un ejemplo, a imitar, de que la novela negra sigue siendo el reflejo del lado oscuro de la sociedad.

Grandes fortunas personales y grandes imperios empresariales tienen en las guerras su punto de inicio, su consolidación o su engrandecimiento, cuando no todo a la vez.

Los perdedores lo pierden todo. La vida y lo que tuvieron. Los ganadores se lo quedan todo incluidos los proyectos y el futuro de aquellos que murieron.

Ferrán Simón, de edad tan avanzada como su alzhéimer, ha recibido una carta de su padre David. Un hecho que no debería sorprender a nadie si no fuera porque el remitente habría fallecido más de 70 años atrás.

Román Simón, hijo de Ferrán y nieto de David, periodista en recuperación física y anímica de los efectos de una explosión en el transcurso de su trabajo, y con tiempo por delante, decide desplazarse a Foix, pequeña villa francesa a tocar de los Pirineos, de donde procede la misiva, para averiguar lo que pueda sobre la carta y sus antepasados familiares.

Una excursión sin expectativas va a convertirse en un viaje iniciático de gran trascendencia.

Fernando de Cea Velasco, que ya lleva mucho escrito a sus espaldas, destapa aspectos conocidos pero silenciados de la terrible tragedia de los refugiados españoles que huyendo del expurgo de la Guerra Civil cayeron en manos de nazis más despiadados si cabe.

Y los entreteje con una trama de investigación periodística que le añadirá un componente de denuncia intrínseca, en favor de los silenciados, cuando Román lo publique.

La estructura de la novela y el delineado de personajes permite empatizar rápidamente con las víctimas de la persecución, para acercarse a comprender, aunque solo sea un poquito, la terrible existencia y el desespero por sobrevivir.

Una novela de madurez literaria, cuyo desarrollo transcurre intercalando dos tiempos, los hechos de 1942 y los de tiempo presente. Así la investigación actual es una suerte de reproducción en perspectiva de lo que acaeció. Pero el peligro no finalizó con las contiendas bélicas y Román pronto entenderá que sus pesquisas van a tener como consecuencia remover un avispero.

Esvástica de Hielo es una gran novela negra trágica con trasfondo histórico. Acabada la lectura hay que darse tiempo para asimilar el gran impacto emocional que conlleva. No se la pierdan.

Del mismo autor y en este mismo blog se han reseñado:

Puentes y Sombras 

El suave roce de tu pelo 

Cenizas para un blues 

El leve brillo de tus labios 

lunes, 1 de septiembre de 2025

Persiguiendo a Bécquer de Miguel Lago

La famosía, palabra que me acabo de inventar para identificar a las personas que suponen un colectivo exclusivo para quienes la fama acompaña como un bien y una maldición, suele despertar filias y fobias. Suele tener de palmeros a fans irredentos, pero también suele interesar a seres envidiosos, rencorosos y alimentar deseos de venganza.

Es lo que tiene estar en el punto de mira, que nunca se sabe si es del disparador de una cámara fotográfica, aunque sea en un móvil, o de un rifle con bala en la recamara.

Hay personas muy, muy, famosas que son humildes, seguro que las hay, aunque cueste encontrarlas, pero hay más con un ego que supura formando una aureola de superioridad que tiene, si es que la tiene, la condescendencia en sus relaciones como la versión más dulce. La más agria ya ni se la cuento.

Antoñito sabe que quiere ser de mayor y su abuelo don Manuel lo ayuda para conseguir su sueño, y ya convertido en Bécquer el sueño se ha materializado en una proyección de su persona urbi et orbe, traducido en una enorme fortuna material y un déficit espiritual como sinónimo de familia con todo el cariño que conlleva, amistades sinceras y amor cómplice.

Bécquer es el cómico que hace reír a todo el mundo, es un seductor, es un truhán y es un señor. Es ególatra y desapegado. Es el sueño húmedo de mujeres jóvenes y maduras. Es el deseo de toda agencia de representación artística.

Llena teatros y salas de espectáculos. Todo el mundo lo encuentra encantador. Todo el mundo menos alguien que ha decidido que ese mundo que lo adora, estará mejor sin él y se ha propuesto matarlo.

Y empieza el espectáculo.

Ante la evidencia la intervención policial es inevitable y Elena Izaguirre, alguien que de jovencita le idolatraba pero que ahora no lo reconocería ni muerta, es la encargada de la investigación.

Y Bécquer es mucho Bécquer. Y Elena es muy Elena. Choque de personalidades a la vista; la de quien está acostumbrado a tenerlo todo con solo chasquear los dedos y la que está acostumbrada a luchar con todo y contra todo para hacerse valer y respetar por su condición profesional.

Del odio al amor solo hay un paso y la ternura puede doblegar a quien se preste a comprender, si dedica el tiempo necesario para ello.

Miguel Lago, a quien hemos visto en programas de televisión, se estrena con esta novela amable, que, para quienes hayan seguido la serie de televisión Castle, guarda mucha relación en su concepto general y en comportamiento de los personajes. El famoso y la inspectora, una inspectora que por cierto se llama Beckett, lo que acentúa el parecido ¿casualidad?

La novela es de corte rápido y estimulante en su vertiente social y es que el modo de vida que otorga el dinero, mucho, mucho dinero, es algo que a todos nos gustaría probar alguna vez.

El caso policial es de sesgo enigmático, aunque la escasez de protagonistas revele casi de inmediato la solución.

Pero en cualquier caso la lectura es entretenida, salpicada de humor y comportamientos infantiles de Bécquer que tira de contactos y saca rédito a su fama, de nuevo recuerda a Castle, y con una intriga que no solo se mantiene hasta el final sino más allá.

Cuando la lean sabrán a que me refiero.

lunes, 18 de agosto de 2025

Crimen en alta mar de Robin Forsythe

Cuando Vereker, pintor aficionado aún por despuntar, se deja convencer por su amigo Manuel Ricardo para viajar en un crucero de placer por el Mediterráneo está lejos de sospechar que su otra afición, la de emular a los detectives investigadores de crímenes, va a verse colmada.

Y así sucede, al producirse la muerte de una joven por problemas cardíacos en los primeros días del viaje. Nada hace suponer que no sea de muerte natural, su familia a bordo lo confirma, sino fuera que ha desaparecido un collar de diamantes de gran valor económico y que la finada lucía a juego con su belleza.

Tal hecho dispara la imaginación de Vereker, un diletante sin penurias económicas y con una gran capacidad intelectual, enfocada en la investigación criminal, para relacionar hechos y sacar conclusiones que cuenta con la colaboración de su amigo Ricky, a modo de Watson, un mujeriego y bon vivant con los bolsillos siempre vueltos del revés.

El argumento de Crimen en alta mar está claramente definido en sus aspectos de presentación, nudo y desenlace. Empieza a bordo del lujoso navío Mars, continua en Lisboa y finaliza en Jevington, localidad en plena campiña inglesa.

Los desplazamientos aportan un ritmo dinámico y los cambios de escenario dan pie a apuntes localistas y gastronómicos que complementan el glamur asociado a este tipo de relatos.

Personajes amables, humor inteligente, ambientes elegantes, servidumbre atenta, etiqueta y cortesía, crímenes respetuosos… los ingredientes indispensables e infalibles de la novela criminal británica del siglo de oro, del que Robin Forsythe, su autor, es notable exponente.

Así, la trama funciona como un reloj y como tal es fiable en su capacidad para ofrecer un rompecabezas complejo, que busca entretener y estimular la mente.

Si les va el policial clásico de principios del siglo XX no pueden perderse esta obra. Satisfacción garantizada.

 

 

 

lunes, 11 de agosto de 2025

Asesinato en Rudhall Manor de Anya Wylde

Igual que las óperas tienen su sección bufa, la novela policiaca tampoco evita su versión paródica.

Pero incluso la bufa sigue siendo una ópera; algo que en la parodia policiaca no siempre se consigue. Asesinato en Rudhall Manor es un claro ejemplo de ello.

A Rudhall Manor llega, proveniente de un orfanato, Lucy Trotter para encarar su vida como institutriz. Sobradamente formada culturalmente no encontrará en su nuevo hábitat ocasión de demostrar sus habilidades y además, como la Cenicienta del cuento, será menospreciada por la familia de la mansión y el servicio, enraizado desde hace tiempo.

Por eso al descubrirse el cuerpo apuñalado de lord Sedley, y en paralelo el robo de unas valiosas joyas de la caja fuerte, Lucy se convierte en la sospechosa número uno y la mejor candidata para el verdugo.

A lord Adair, recién llegado y con fama de resolver casos se le encarga la resolución del crimen y la recuperación de las joyas. Y Lucy, cuyo cuello es el que está en juego, realizará su propia investigación por si aquel fracasara.

El romanticismo, lord Adair es un adalid de la belleza masculina y objeto de deseo de toda mujer que lo trata, se alía con lo sobrenatural, los fantasmas existen y se manifiestan, para aportar situaciones en las que el humor toma el timón.

Aún y así la novela no parece sentirse cómoda y su avance es el de alguien que a oscuras pretende encontrar la salida de un enorme salón atestado de muebles.

Un claro ejemplo de que la suma de los factores si altera el producto, y del axioma de que menos, es más.

Anya Wylde aporta su granito de arena al género que queda diluido entre obras de mayor envergadura y consistencia. Su redacción tiende a entrar en bucles espontáneos que, como tapones, impiden el fluir de la trama y se pierde en diálogos, que más parecen soliloquios, que dicen muchas palabras pero que cuentan poco que resulte interesante

En las librerías la encontraran en la sección chic-lit encuadrada como Young-adult.

domingo, 3 de agosto de 2025

Deudas de sangre de Vladimir Hernández

Mercè es una recepcionista de un hotel del eixample barcelonés que ve como su vida da un giro de 180 grados por tomar una decisión en un arranque de valentía con el que agota el cupo que los dioses le han otorgado.

Elenka es una escort de lujo, rusa y subyugada por un poder tan ominoso como poderoso del que solo pensar en librarse ya provoca dolor, aunque sea su solo objetivo, y que está alojada en el hotel donde trabaja Mercè.

Issa es una ex de un cuerpo militarizado cubano de elite a quien los suyos no perdonan que les haya abandonado y por eso lleva tiempo huyendo de todo y de todos sin dejar de mirar atrás.

Tres mujeres, sin nada que les una, van a ver sus destinos confluir de repente y van a depender unas de otras si quieren sobrevivir.

A los thrillers hay que pedirles, pero no exigirles, credibilidad argumental, y sobre todo que haya buenos y malos claramente diferenciados. Buenos tan buenos como para identificarse con su lado vulnerable y desearles una victoria que de por si se antoja imposible, como en este caso donde tres mujeres van a enfrentarse a una rama de la mafia rusa tan poderosa como el ejército de un pequeño país. Y malos tan malos y desagradables como para desearles la muerte no sin antes una buena dosis de sufrimiento que es solo una ínfima parte del que han prodigado generosamente.

Y Vladimir Hernández sabe como dibujar personajes carismáticos.

Deudas de sangre es un thriller que demuestra haber hecho los deberes para obtener tal calificación. Personajes carismáticos, violencia, cadáveres, persecuciones y giros de guion, todo servido a ritmo de vuelta rápida de fórmula 1.

También es otro thriller más con todos los ingredientes que hoy el mercado demanda: protagonistas todas femeninas, guapas, sexis y empoderadas. Más listas, atrevidas y resolutivas que los protagonistas masculinos, todos secundarios, previsibles y testosteronicos. Lesbianismo light y tour nomenclátor por calles y carreteras y topónimos que dan verosimilitud a los recorridos pero que no aportan idiosincrasia argumental más allá de movimiento.

Deudas de sangre es de lectura fácil que les va a entretener, incluso emocionar sin exigirles nada a cambio.

Del mismo autor también reseñadas en este blog y con más enjundia, y por ello más recomendables si cabe, están Indómito y Habana réquiem 

domingo, 20 de julio de 2025

Pandemónium del pastel de puerco de Steve Higgs

Cuando Albert con 78 años, viudo y detective superintendente retirado, adopta a Rex Harrison, un perro policía, no se espera que éste sea un rechazado del cuerpo por su incorrecto comportamiento.

Y cuando decide aprender a cocinar, siempre lo hacía su mujer, recorriendo su país, las Islas de Gran Bretaña, para obtener las recetas de sus platos favoritos, tampoco se espera que sus estancias supongan implicarse en investigaciones criminales.

Su periplo empieza por Melton Mowbray, una población en la región Midlans del Este perteneciente al condado de Leicestershire, famosa por su elaboración de pastel de cerdo.

Allí Albert se apunta a una clase en El Emporio del Pastel de Cerdo Perfecto de Agnew y justo cuando esta va a empezar se encuentran encima del montón de carne picada un dedo pulgar humano.

No solo se suspende la clase, como era previsible, sino que la policía clausura el establecimiento hasta analizar si en la carne trinchada se halla el resto del cuerpo.

Y Albert enternecido por la debacle económica que supondrá para la joven Donna, que gestiona el negocio mientras su madre se recupera de una operación de apendicitis, se conjura con ella para llevar una investigación paralela a la policial y acelerarla para acortar los tiempos de espera y poder reabrir el negocio.

Albert Smith aportará sus conocimientos adquiridos durante años de servicio y también sus contactos en el cuerpo, principalmente sus tres hijos todos policías en activo, y Rex Harrison su olfato y su adiestramiento

Así con Pandemónium del pastel de puerco, una novela policiaca con alto contenido en colesterol por su exquisita receta culinaria, Steve Higgs inicia la serie que bajo el título genérico de Las Aventuras Culinarias de Albert Smith ya lleva 15 recetas publicadas, una por novela, de las que 7 están traducidas, bastante mal, por cierto.

Esta serie Cozy Crime, de ritmo sosegado, no podía ser de otro modo con un protagonista de 78 años que no destaca precisamente por alardes físicos de alto rendimiento, rebosa simpatía hacia unos personajes tan ingenuos que casi parecen bobos para favorecer los aportes cómicos que hacen que sea una lectura cómoda.

Una idea de planteamiento sobre gastronomía criminal original y divertida que no se debe leer con el estómago vacío.

domingo, 13 de julio de 2025

Ballard

Ballard es nueva serie policiaca de streaming y ya es como de la familia. Es un spin-off de la serie Harry Bosch guionizada por el propio autor de los libros, Michael Connelly.

La actriz Maggie Q es la detective Renée Ballard única policía titular de una unidad, formada con la ayuda de una voluntaria, una becaria y dos jurados, inicialmente, encargada de investigar casos sin resolver.

Casos abiertos o mal cerrados que escuecen por el simple hecho de recordar constantemente que a pesar de que las fuerzas del orden cuentan con más recursos que los criminales, estos pueden llegar a no ser identificados o desaparecer sin más.

Ballard no ha elegido destino; era eso o una salida (des)honrosa del cuerpo. Ballard se ha atrevido a denunciar a un compañero hombre y eso, aunque sea culpable, no está bien visto. El cuerpo policial es de lo más corporativista, homófobo y misógino del universo de cuerpos donde el heteropatriarcado ha sido siempre el rey.

Y no es una proclama reivindicativa, que si, sinó una constatación de un hecho aun hoy no afrontado y mucho menos solucionado.

Como spin-off de Bosch, transcurre en Los Angeles, y tanto Bosch como otros protagonistas de su serie hacen apariciones crossover i cameos en esta nueva serie. Lo que decía, acaba de empezar y ya te sientes como en casa. Y es que todo el universo literario, de ficción y formal, que acompaña a la serie raíz se continua en esta otra.

Las mismas pausas, los mismos diálogos con sentido y contenido, no vacíos que solo sirven para rellenar silencios, los mismos métodos de investigación y sobre todo y ante todo el mismo comportamiento ecuánime, el mismo rigor por la justicia y el mismo sentido ético por la verdad caiga quien caiga.

El equipo de Ballard, compuesto a partes iguales por experiencia y bisoñez entusiasta, trabaja sin descanso y con afán desde un sótano, lo que acentúa el abandono y el desprecio de quienes lucen placa como patente de corso, y cada uno de los personajes suma y aporta lo que enriquece al colectivo.

La serie se inicia con los interrogantes de porque a Ballard se la ha castigado de ese modo, porque está enemistada consigo misma y su entorno familiar, porque tiene un caso entre manos tan importante y contrareloj, y se irán resolviendo, por ser tramas lineales, a medida que avanzan los episodios.

Lo que no quita que haya casos auto conclusivos que confirman la verosimilitud de la serie, en el sentido de que nunca hay un solo caso sino muchos y a la vez. En ese aspecto entra de lleno en el subgénero de novela negra conocido como Policial Procedimental. Rigor y cumplimiento de las normas dentro de lema servir y proteger.

Ballard es una gran serie y merece ser seguida con atención. Es digna con el espectador y respetuosa con su inteligencia; además, está bien interpretada, bien narrada y con un tempo tan bien establecido que pide a gritos larga vida.

miércoles, 9 de julio de 2025

Las Aventuras de Sherlock Holmes de Berardi y Trevisan

Estamos ante una obra hecha para que las neuronas se relaman y los ojos se desorbiten.

Para acercarse a un gran clásico sin hacer el ridículo ni pasarse de soberbia hay que hacerlo con prudencia, fielmente y sobre todo de forma respetuosa.

Sherlock Holmes es el clásico entre los clásicos, y a pesar de sus adaptaciones cinematográficas y televisivas, más mediáticas y accesibles, su obra escrita, aunque referencia obligada de la gente que escribe y de la gente que lee, lamentablemente es poco conocida.

Esta edición (una cubierta magnífica), a cargo de Ponent Mon es una recopilación de 6 historias aparecidas entre los años 1986 y 1989 en la revista italiana L’Eternauta. 

Giancarlo Berardi, el cerebro de la obra, sabe que cualquier guionización de esas narraciones históricas será revisada minuciosamente; que los aciertos no serán aplaudidos por estar ya descontados de antemano, mientras que los desajustes serán objeto de crítica y befa.

Por eso se ha arrimado el máximo posible al texto original, tanto como le permite la adaptación al cómic, que tiene su propio lenguaje y por ello su propio ritmo narrativo supeditado al componente visual. Y elegir 6 casos del Canon no solo indica valentía sino también confianza en sus posibilidades.

Y ateniéndose a ese comportamiento propio del cómic, construye una obra toda diálogo, y se olvida de las cartelas para que sean los dibujos quienes sustituyan el papel de voz en off.

Y dejar este apartado a Giorgio Trevisan, para solucionar la parte gráfica, es no solo un acierto sino toda una garantía.

Con un estilo de realismo clásico, y un dominio absoluto de las técnicas de dibujo a lápiz y difuminados a fin de conseguir distintos y variados efectos estéticos, da como resultado una serie de precisos fotogramas enlazados por las imprescindibles elipsis sin que el ritmo narrativo se vea afectado lo más mínimo; todo lo contrario.

El resultado gráfico consigue ese ambiente claro-oscuro de la época y también ese aire enrarecido por la suma de humedad y contaminación. 

La elección de Basil Rathbone y Nigel Bruce como modelos para los dos protagonistas es un pleno.

Asegura una aceptación implícita por parte de fans de los personajes, no en vano es la pareja más reconocible en sus papeles de Holmes i Watson por su verosimilitud con el ideario colectivo y por eso resulta la más entrañable.

Pero también porque evoca esa época dorada en la que la lectura de los relatos aún no se ve como algo anacrónico y permite aceptarlos como algo de nuestro pasado aunque su escritura se remita a tiempos más pretéritos.

Y el resultado es un cómic que supone un privilegio al que nadie debería renunciar

viernes, 4 de julio de 2025

El retiro de Celeste Bena de Rette

El peor miedo de alguien que vive de la escritura es caer en el Síndrome de la hoja en blanco.

Esa desazón que supone el bloqueo mental ante una página en blanco que debe ser rellenada con texto. No hay ideas; hay temor a crear algo de inferior calidad a la obra anterior; hay síntomas físicos: angustia, insomnio, inapetencia y otros.

La incapacidad creativa afecta incluso a la relación social por temor a ser interpelado por como va la nueva novela y no poder evitar caer en una desesperación que suponga un desborde incontrolado de lágrimas.

Paula, editora que aspira a mejorar su cargo, ha decidido ofrecer un retiro con gastos pagados a un castillo semi abandonado, sin cobertura y alejado varios días de cualquier lugar civilizado, a siete de sus firmas fetiche del género de terror, autoras y autores (no hagáis caso de las reseñas que hablen de 6, significa que no han leído la obra) que se encuentran en esa situación en la que la inspiración ha decidido tomarse vacaciones y se ha marchado sin importarle las consecuencias.

Así a modo del clásico 10 negritos de la simpar Agatha Christie, 7 escritores: Odette, Erik, Ana, Sandra, Oscar, Carmen y Terrence, y 3 encargados de atender su estancia: Isabel, responsable de la organización, Sebastián, el cocinero y Kevin, camarero y ayudante para lo que salga, vivirán unos días de retiro esperando que la atmósfera del lugar les inspire para su próxima novela.

Cada cual tiene sus miedos, sus fobias y sus fantasmas, y el ambiente ominoso de un lugar que parece construido para el crimen no solo no les ayuda a superarlos, sino que consigue que se materialicen de forma que su mente no sea capaz de distinguir entre realidad y ficción.

La autora, Celeste Bena de Rette, ha escrito una historia de suspense, que combina el terror de la novela gótica con el terror psicológico a los que añade un argumento policiaco clásico: el del crimen en lugar cerrado.

Con los apagones, tormentas incesantes, edificio viejo con sus sonidos y sus quejidos, consigue una atmósfera claustrofóbica y combina suficientes elementos para conseguir que todos los presentes sean sospechosos. La personalidad de cada uno, su vanidad, su ego, van a ir emergiendo desde la educación cortés al principio hasta el abandono que supone la desesperación que muestra el egoísmo por sobrevivir.

El retiro les deja frente a su yo anterior, y no siempre es agradable ni asumible. La novela está estructurada en tres partes, a modo de capas, lo que le confiere una particularidad inusual y la distingue del resto de oferta.

Una capa es la conocemos a través de la lectura, en la segunda tendremos una interpretación de lo ocurrido y en la tercera una explicación. Todo muy bien enlazado para que nada quede sin respuesta y podamos identificarnos con el pavor que sufren los protagonistas, teniendo miedo al propio miedo. Y es que la peor oscuridad es la que se lleva en el interior y no se puede ver.

domingo, 15 de junio de 2025

El primer caso de Unamuno de Luis García Jambrina

Hay novelas que son lecciones de vida y cuando además son del género de novela negra, son también lecciones de muerte.

De vida, cuando incitan a la reflexión sobre lo que siempre se asume como verdad y tal vez no lo sea; cuando sugiere revisar si los principios sobre los que se adecuan los actos son tan sólidos como para explicarlos y no solo justificarlos, cuando ofrece perspectiva sobre la visión de la historia.

De muerte, cuando la soberbia impide entender que toda acción tiene una reacción y cuando hay enfrentamiento minusvalorando la capacidad de proyectar violencia que tiene el oponente.

A la novela negra se le exige que la crítica política y social no solo esté presente, sino que, además, si aquella es histórica, se sustente en datos contrastables.

El primer caso de Unamuno cumple con todo lo anterior, no solo es una novela negra que aúna crítica política y social sobre un hecho histórico contrastable, sino que además es una lección de vida y de muerte.

Cuando Miguel de Unamuno lee un artículo en un periódico que castiga, denuncia y denigra a los habitantes de Boada, un villorrio salmantino, por manifestar públicamente su intención de emigrar en bloque a Argentina al no tener medios para vivir y, literalmente, lugar propio donde caerse muertos, monta en cólera y se informa in situ para responder, con su verbo afilado, con otro artículo que, como sucede a veces cuando no se mide la fuerza del impulso, tiene el defecto de coincidir con un asesinato que lo convierte indirectamente en instigador y para muchos, de ser mano ejecutora.

Miguel de Unamuno se emplea a fondo, para su regocijo, en resolver el crimen no sea que acabe injustamente en la picota y con la ayuda de un Watson coyuntural, en la figura del abogado defensor Manuel Rivera, y de la misteriosa colaboración de Teresa Maragall, una anarquista catalana, descubre que una cosa es la palestra literaria y otra una investigación criminal y que la gran diferencia es que en la segunda puedes morir.

La España Vaciada no tiene otro origen que el desahucio de los habitantes de pueblos que ven como las tierras que han labrado y cosechado y que han servido de pasto a sus animales durante generaciones son subastadas públicamente, con amaños e intereses y comisiones, para devenir dehesas privadas o cotos de caza para deleite de señoritos.

La privatización de la tierra supone hambruna y es el motor de una migración por necesidad que no por voluntad propia.

Luis García Jambrina, doctor en Filología Hispánica y profesor titular de Literatura Española en la Universidad de Salamanca pone voz a Miguel de Unamuno, a veces sacada de textos originales y otras de suposiciones, pero ajustadas a la realidad de un personaje que ha trascendido a la persona y que, por desgracia, resulta poco conocido para la mayoría de quienes presumen de letrados de este país.

La novela es espectacular. Su léxico, cuidado, rico, prolífico y ajustado a su tiempo; los personajes trabajados hasta el mínimo detalle en su aspecto físico y psicológico y los escenarios cuidados como para ser reconocibles incluso con el paso de los tiempos.

Y esa Teresa Maragall, esa Teresa efímera de los poemas y esa Teresa física y sensual con la fuerza y convicción de quien antepone sus ideales a la propia vida. Esa Irene Adler capaz de sacudir la esencia más primaria de Unamuno y voltear sus convicciones. Esa Teresa se merece no una novela sino una serie de novelas para ella sola.

Léanla si les gusta la novela negra y más aún si les gusta la literatura, ya que raras veces se encuentran en el mismo libro. Mientras esperamos la segunda entrega, refocílense: ¿Hay que sentir los pensamientos? ¿Hay que pensar los sentimientos

domingo, 8 de junio de 2025

El Juicio de Rob Rinder

Lo del juicio justo puede sonar a perogrullada, pero nada más lejos de la realidad.

Un juicio puede y debe ser legal, pero en el momento en que su desarrollo se sustenta en pruebas que pueden ser manipuladas, en la habilidad por la defensa o por el ministerio fiscal para presentar y retorcer los hechos y en la interpretación (y, por que no, los prejuicios) que pueda conceder cada miembro del jurado, el veredicto puede acercarse a ser justo, pero imposible asegurarlo al cien por cien.

Adam Green un joven abogado que espera que le hagan fijo en un bufete donde está como pasante, debe preparar el caso del siglo junto a su mentor Jonathan Taylor-Cameron, prestigioso abogado que en su vida personal solo busca placer y en la profesional tranquilidad. Un caso que podría consagrar a un abogado, aunque en esta ocasión no parece que sea de esos ya que se anuncia perdido de antemano.

Grant Cliveden, policía y héroe nacional, muere envenenado cuando está a punto de declarar en un juicio. No parece haber ninguna duda de que Jimmy Knjght, condenado en libertad vigilada, por un delito en el que Gran Cliveden le detuvo, es el culpable. Hay testigos de amenazas, hay seguimiento de llamadas telefónicas, hay video de un encuentro minutos antes del deceso:  blanco y en botella.

Por eso el caso se presenta perdido de antemano. Nadie duda de su culpabilidad, la policía quiere un culpable y la opinión pública, aleccionada por los medios informativos, parece haber emitido ya su veredicto.

Pero el caso suscita en Adam Green una convulsión mental por un paralelismo familiar, y quiere creer que no solo es inocente, sino que puede demostrarlo, así que se dedica en cuerpo y alma a analizar detalladamente los hechos para buscar un resquicio que como mínimo aporte esa duda razonable que puede significar diferencia entre la cadena perpetua o la libertad.

Adam no solo cree en la bondad de la justicia sino también en su necesidad,

Rob Rinder, el autor, es abogado penalista así que escribe desde la experiencia, mostrando los entresijos que rodean la labor de los bufetes de abogados y los que enmarcan los juicios con todos sus virtudes y defectos.

Y como en las mejores novelas de juicios nada es definitivo hasta que no se cierra la contracubierta.

El juicio, es una primera novela, cuyos giros inesperados satisfará a lectores de thrillers jurídicos y también a quienes valoran los argumentos con personajes complejos y atormentados.

 

domingo, 1 de junio de 2025

El año de la langosta de Terry Hayes

Estamos ante un thriller geopolítico de gran calado, tanto como para que desborde los límites del género y se extienda hacia otros subgéneros que podrían, a priori, no entenderse, o aceptarse, dentro de la línea argumental seguida desde el inicio, lo que hace que roce la grandilocuencia.

Y es que Terry Hayes, su autor, que nos maravillara con su anterior obra Soy Pilgrim, se ha embarcado, nunca mejor dicho, en un relato en el que, siguiendo a Kane, agente especial de la CIA, va desmenuzando realidades e involucrando ficción, y directamente ciencia ficción distópica.

Ciencia ficción que incorpora vida extraterrestre microscópica, humanos mutantes casi invencibles, y viajes en el tiempo.

Dicho esto, ya están avisados de lo que les espera. Y es que 800 páginas dan para todo eso y mucho más.

La novela va de Kane. De su vida privada, personal, y de su vida profesional. De sus éxitos y sus fracasos. De su lucha por salvar el mundo anteponiéndola a cualquier razonamiento sensato.

Kane no cae bien, no es el clásico héroe con quien queramos identificarnos, pero es el elegido y eso basta para tomar partido.

Es un agente cualificado y especialmente entrenado para localizar objetivos en cualquier parte del mundo, especialmente en zonas de acceso restringido, va a vivir misiones de gran realismo y peligrosidad en zonas conflictivas como Pakistán, Irán o Rusia, durante tres cuartas partes de la novela.

Y va a trascender en tiempo y espacio en una cuarta, en un giro tan abrupto e inesperado que para muchos lectores no solo resultará increíble sino también inaceptable y claramente invalidante.

El autor exige al lector un acto de fe. Un dejarse llevar hacia lo desconocido, sin cuestionarse su verosimilitud. ¿Acaso no es literatura de evasión? Así, pasa de lo creíble, plausible y deseable en cualquier argumento de espionaje, a un escenario donde nada de lo que sucede responde de forma verosímil.

Y es que, a los hechos históricos y constatables, y otros muchos ocultos y negados, llevados a cabo por las fuerzas militares de los Estados Unidos, mercenarios subcontratados y la CIA incorpora elementos indemostrables, rindiendo homenaje al tan cuestionado Experimento Filadelfia de 1943.

Diez años ha tardado Terry Hayes en publicar su segunda novela y gustará más o menos, pero es innegable que lo que plantea podría ser realidad. Una realidad no deseada pero no improbable. Mientras la leen, piénsenlo.

No en vano el autor ha ejercido de periodista de investigación y corresponsal político y ha tratado con servicios de inteligencia de distintos gobiernos y soldados de fuerzas especiales, por lo que conoce lo que se ve afuera y lo que se cuece dentro.

domingo, 25 de mayo de 2025

Bangkok Tattoo de John Burdett

A ojos de occidental Tailandia es un supermercado de placer sexual, y si bien en parte es cierto, es un gran lupanar por la desinhibición de sus chicas que ven su tarea como otro trabajo más, también tiene sus reglas y no todo vale.

John Burdett caricaturiza, hasta extremos de gran dramatismo, la realidad social tailandesa para disponer de un escenario donde las escenas de sexo, borrachera, comidas exóticas y picantes, drogas y corrupción a todos los niveles, le permitan dar verosimilitud a un argumento que a todo lo demás le añade operaciones encubiertas de la CIA y terrorismo de Al-Qaeda.

Y es este conjunto de temas de distinta tipología y por eso de distintos colores lo que refleja Tailandia, un carrusel de emociones sensuales.

El detective de la policía Sonchai Jitpleecheep, a quien conocimos en la primera novela de esta serie, vean aquí la reseña de Bangkok 8 y que trabaja también en la gestión del club de alterne que regenta su madre, tiene que hacerse cargo de una muerte violenta que tiene como principal sospechosa de homicidio en defensa propia a la joven Chanya, la más rentable, la más deseada y a la que el propio Sonchai hace ojitos que van más allá de una satisfacción rápida.

Chanya ha regresado, del hotel a donde había ido con un americano, toda manchada de sangre y en un estado mental de confusión y desapego. Cuando Sonchai se persona en la habitación encuentra al americano muerto y su pene cortado encima de la mesilla de noche.

Rápidamente contacta con Vikorn, su superior, y planifican una versión oficial que pueda justificar el hecho y exonere a Chanya.

Lo que no sospechan es que el caso es una fuente de ramificaciones i complicaciones que no van a tardar en descubrir y enfrentar.

Bangkok Tattoo, tiene mucho de Bangkok y también del triangulo de la droga del norte y de la comunidad musulmana del sur. Y tiene mucho de tatuaje y de su trascendencia más allá de la habilidad artística.

Bangkok Tattoo es un pase de diapositivas de turista. Algunas originales y bien encuadradas y otras sosas y desenfocadas, pero siempre en número excesivo.

La trama tiene demasiados hilos y según cual aprieta mejora el ritmo y según cual, distrae de lo importante; en cualquier caso se lee con la avidez que genera la curiosidad por esa cultura lejana y por la trama policiaca que acaba desembocando en un final inesperado y más interesante si cabe.

miércoles, 21 de mayo de 2025

D’eath – 1. El Duelo de Vicente Cifuentes y José A. Fideu

Ulysses D’eath, un detective racionalista, va a enfrentarse en un singular duelo con  Delynne Sutherland, una médium, que proclama la verdad del espiritismo.

Ambos, junto con unos pocos elegidos acompañantes, van a permanecer aislados en una mansión situada en una solitaria isla, donde van a practicar sesiones en las que D’eath espera desenmascarar a la vidente y demostrar al público la falsedad de dicha práctica.

Partiendo de esta premisa que nos retrotrae a cuando Houdini y Doyle se enfrentaban por la misma razón.

Cuando el ilusionista ridiculizaba a supuestos videntes y médiums a los que retaba a comunicar un peculiar mensaje, y Doyle se empeñaba en creer en todo lo sobrenatural incluidas la hadas.

El guión se enrosca para añadir el suspense propio de la famosa novela policíaca 10 negritos, de la sin par Agatha Christie, al tomarle prestado el aislamiento insular, las invitaciones selectivas y la constatación de que entre el grupo hay un asesino.

Una intrigante historia cuya tensión va in crescendo y culmina en un doble final en el que se dirime el duelo entre la lógica y la fe, y se resuelve el caso criminal; y a la vez se abre la puerta a una nueva entrega igual o más apasionante.

José A. Fideu se encarga del guión que, aunque no resulte muy original, consigue que hilvane bien todos los hilos para mantenerlo cohesionado y no mostrar fisura alguna, aunque la confesión de D’eath peque de melodramática. A la trama principal, le añade una subtrama en paralelo que no es sino el embrión de un nuevo caso para D’eath que pone los dientes largos a los lectores.

Y Vicente Cifuentes ofrece un dibujo trabajado y preciso, buena ambientación de época, paleta de colores adaptada a cada secuencia, muy similar a la empleada en su obra Whodunnit, e idéntica variedad en las expresiones y los gestos que confieren esa actividad propia de los seres vivos aunque que sea en plano bidimensional. Solo, por mejorar algo, algunas barbas de trazo demasiado recto y uniforme desdicen lo anteriormente expuesto. Un trabajo que entra bien por los ojos y satisface plenamente a quien lo mira.

La edición a cargo de Serendipia cuida hasta el mínimo detalle, así que el libro resultante en formato y continente tiene todo lo que se le debe pedir a una obra de calidad.

Hay que seguir a D’eath y a este tándem de creadores que prometen una serie llena de misterios y sobresaltos al más puro estilo de las novelas enigma de la Edad de Oro del policial británico.

Esto no ha hecho más que empezar. Afortunadamente.

 

viernes, 9 de mayo de 2025

Asesinato en el Club de H. Paul Jeffers

Fin de año de 1935 en Nueva York, en el Onix Club cae muerto a balazos, Joy Seldes, un gánster de poca monta y su viuda, una joven muy atractiva y seductora, contrata al detective privado Harry McNeil para que descubra quien ha matado a su marido.

McNeil, un expolicía que tiene su despacho-vivienda, en el mismo edificio del Club, irá descubriendo, a medida que avance la investigación, que las buenas intenciones siempre ocultan malévolas expectativas.

Asesinato en el Club ofrece un claro argumento clásico de novela negra americana en la época de su apogeo:

Un club de jazz, whisky, una femme fatale, un robo de diamantes valorados en tres millones de dólares, muertos y más muertos, policía corrupta, gánsteres, periodismo legal y periodismo amarillo y un advenimiento nazi en América que sigue los pasos del europeo.

H. Paul Jeffers la tituló Jazz Gang, Banda de Jazz, y es que grandes músicos de jazz están en el ambiente de la obra, que por otra parte consigue atrapar el interés con un ritmo bailable y unos diálogos rápidos y concisos.

No hay respiro y aunque al leerla hoy, que ya se ha leído mucho, se pueda adivinar por donde irán los tiros, nunca mejor dicho, no pierde interés y reconforta encontrar un argumento convincente y tan expresivo.

Cada capítulo trae una nueva sorpresa y va encaminando al investigador, siguiendo nuevas pistas, por el camino correcto.

Solo la encontrarán en la sección de usados y mayormente en catalán, ya que la publicó La Cua de Palla manteniendo el título original.

Su lectura, ahora que el Cozy Crime está tan de moda, permite resarcir a aquellos escritores, de novela negra clásica, casi desconocidos ya que prácticamente no llegaron a traducirse y en cambio estaban al mismo nivel de los que si tuvieron esa suerte.

Leyéndola van a sumergirse en una época reciente pero que nos parece lejana por lo mucho que han cambiado las relaciones interraciales, aunque aún no sea suficiente.

lunes, 5 de mayo de 2025

El Gabinete del Dr. Leng de Douglas Preston & Lincoln Child

Esta nueva entrega de la ya larga serie protagonizada por el agente especial del FBI Aloysius X. L. Pendergast, viene a secuenciar unos hechos ya conocidos, por lo que resulta ser la tercera entrega de un arco argumental iniciado en Los asesinatos de Manhattan y continuado en Sin una gota de sangre.

Los autores, Douglas Preston & Lincoln Child, lo denominan El cuarteto Leng, por tener a ese doctor, antepasado de Pendergast, como principal protagonista encarnando el mal hasta una dimensión multiverso.

Acompañar a Pendergast significa aceptar de antemano argumentos que transitan sobre terrenos pantanosos, y no solo literalmente, donde lo sobrenatural está constantemente presente y los límites del terror se muestran tan indefinidos como para no poder evitar meterse de lleno en algún episodio tenebroso.

Un thriller con mayúsculas, con capítulos alternos protagonizados por los distintos personajes relevantes, en lugares y momentos temporales distintos, llevado al extremo lo que incluye viajar en el tiempo, y giros, que, aunque esperados pues son marca de la casa, siempre sorprenden y que al presentarse al cierre de cada capítulo hace que sea imposible despegar la novela de las manos.

Poco más se puede decir sin destripar el argumento, solo que Constance Greene tomó una decisión, llevada por un loable sentimiento de generosidad, creyendo tener el control de la situación y se demuestra que la imprevisibilidad no responde a la lógica y que las consecuencias no solo son trágicas en el momento presente de los sucesos sino tener un impacto en ese continuum espacio tiempo que la física nos explica que existe pero sin tangibilidad. Hasta ahora que Constance ha viajado del presente al New York de 1880.

Si con lo dicho no he despertado su interés por su lectura, solo me queda recomendar y volver a recomendar no solo esta novela, sino toda la serie que con esta alcanza las 21 entregas, a cual mejor.



miércoles, 30 de abril de 2025

Muerte en los Hamptons y Crimen imprevisto de Ana Bolox

Estamos ante las entregas 2 y 3 de la serie de novelas policiacas de estilo british y de corte Cozy Crime, Las cosas y casos de la señora Starling.

Y es que después de conocer a Anne Starling en su primera novela, resulta imposible no sucumbir a sus encantos como mujer y a sus habilidades como investigadora, y inevitable leer de inmediato sus siguientes casos.

La primera novela, el primer caso de la señora Starling, Un cadáver muy frío nos presentó al personaje en su plenitud, lean la reseña si no la conocen, y estas dos siguientes Muerte en los Hamptons y Crimen imprevisto nos facilitan su evolución y desarrollo de sus capacidades deductivas, lo que nos permite conocer hasta dónde puede llegar su curiosidad e intrepidez ante un asesinato, y su implicación en la investigación. Un comportamiento que desprecia el miedo y que se siente atraído por el peligro.

En Muerte en los Hamptons el matrimonio Starling se encuentra con otros invitados pasando las fiestas de Navidad en una mansión en los Hamptons cuando uno de ellos aparece asesinado.

Todo un reto del policial clásico, asesinato en habitación y asesino entre el grupo, que Ana Bolox soluciona con habilidad después de hacernos dudar hasta de los muebles.

Y en Crimen imprevisto, Anne Starling recibe la petición de ayuda que le envía Drew Peterson, un policía encarcelado por un crimen que dice no haber cometido. Anne rápidamente toma partido a su favor aunque no solo las circunstancias sino también su compañero Arthur Crawford, inspector de policía de Nueva York, parecen llevarle la contraria.

Ambas novelas mantienen la emoción e interés evidenciados en la primera entrega. Los personajes se han consolidado y ofrecen un amplio abanico de comportamientos y actitudes con lo que no sus comportamientos no resultan un dejà vu, como sucede en otras series.

La autora consigue mantener nuestra capacidad de sorpresa a base de giros inteligentes que los lectores siempre agradecemos, por la consideración que nos supone.

Toque british en New York, romanticismo, humor, crímenes y misterios y por encima de todo esa lucha de sexos que posibilita situaciones risueñas y diálogos repletos de agudeza e ingenio.

Más casos y cosas de la señora Starling, por favor.