viernes, 11 de enero de 2013

1974 de David Peace

1974 es la primera novela de una cuatrilogía, The Red Riding Quartet, a la que siguen 1977, 1980 y 1983 de David Peace y a diferencia de las otras tres, se dice que ésta tiene un final más o menos concluyente por lo que su lectura podría atacarse de forma independiente.

Pero antes un aviso a navegantes: no es una novela para estómagos sensibles ni caracteres susceptibles de traducir las impresiones a pesadillas. Olvídense, busquen otra lectura.

Los que sigan adelante que sepan que van a subir a un ring donde van a ser vapuleados sin compasión alguna. Sin respiro. Van a ser centrifugados junto a pensamientos soeces, diálogos irritantes y actos de violencia límite. Y luego van a ser pasados por una picadora llena de vómito, lagrimas, semen y excrementos. Y luego, bueno, tal vez no haya luego.

No. No es una lectura de recomendación a la ligera en ningún caso, ya que la decisión es de cada cual y cada cual debe asumir las consecuencias de sus actos. Es una novela negra claramente marginal, y no es una crítica, sino un posicionamiento.

Una pequeña de solo diez años ha desaparecido en Yorkshire y la maquinaria policial se pone en marcha para localizarla aunque todo haga presagiar un mal final y las esperanzas a medida que pasen las horas se van a diluir hasta una confirmación aberrante. Eddie Dunford un joven reportero de sucesos del Post tiene en este caso la oportunidad de hacerse con un nombre y un hueco en el mundo de la prensa y se propone conseguirlo.

Eddie acaba de perder a su padre, mantiene una relación de difícil catalogación con una compañera de trabajo, una mala relación con su mentor en la sección del periódico y una relación pseudo filial con su jefe. Su carácter es inestable, carece de paciencia y le falta madurez.

El argumento tiene un punto de apoyo en hechos reales perpetrados por El Destripador de Yorkshire y aunque su factura no es original e incluso tira de tópicos es su particular forma de ser escrito, lo que le confiere cierta originalidad y le da mérito: narrado en primera persona muestra una retahíla de pensamientos y actos entremezclados para mostrar de una forma lo más visual posible las dudas y contradicciones que nos acometen y que nos hacen ser tan vulnerables.

Esta confusión de ideas se hallan también en el argumento, no sabemos si voluntariamente por parte del autor, para darle más verosimilitud y acercarla a la realidad o por falta de madurez narrativa. Los altibajos podrían tener la misma respuesta. Y que hacia el final pierda fuerza, podría buscar también el paralelismo a la condición humana, incapaz de mantener un alto ritmo en nada durante mucho tiempo.

Es una novela negra de negra oscuridad. Sin luz guía. Llena de perdedores. Incluso los ricos y poderosos son perdedores. Es una novela por la que se mueven personajes autodestructivos. De violencia extrema. De corrupción política, de corrupción urbanística, de pederastia, de sexo enfermizo, de sadismo, de brutalidad policial, de racismo, de soberbia, de despotismo, de bajeza moral más allá de cualquier línea no traspasable.

En ella no hay espacio para la sinceridad, para el amor, para la compasión, para los sentimientos. Es demencial, obsesiva y opresiva. Es novela negra expresionista.

Su lectura es absolutamente perturbadora y, como pueden imaginar, no deja buen cuerpo.

Para nada. Incluso es dudoso que su recuerdo pueda ser eliminado con facilidad. Es del todo normal arrepentirse de haber entrado en ese infierno y eso que al principio parecía de lo más normal. No hay exorcismo que funcione para sacar de la mente todo los que sus páginas vuelcan en el lector.

David Peace es atípico en el panorama narrativo actual, pues aunque se le reconozcan rasgos comunes al hard boiled americano, al pasarlos por su propio tamiz desdibuja los límites convenidos y renacen en un estilo híbrido muy sui generis.

Compré este billete de ida inspirado por un post del blog Baba O’Wines, Placeres sensoriales: vino, música y gastronomía, blog de contenido vinícola, y en una complicidad divertida le ha buscado el vino adecuado a esta novela y he aquí lo que sugiere:

“Sin duda a 1974 le añadiría un vino frenético, acorde con el ritmo de narración de la novela. Es decir, un vino vivo, con frescura gracias a su buena acidez, pero a la vez muy complejo como su trama. Por ejemplo, un buen Borgoña tinto de la Côte de Nuits en una añada fría. Y gracias a su complejidad, dentro de Borgoña, iría al pueblo o Comuna de Vosne-Romanée. Vinos con gran paleta aromática, largos, profundos, sutiles…”

Lean pinchando aquí el comentario en el post original donde recomienda la novela.
Espero que esta colaboración sea la primera de otras que aúnen buen vino con buena lectura.

lunes, 7 de enero de 2013

Las lágrimas de Hemingway de Reyes Calderón

Las lágrimas de Hemingway es la primera novela de una larga saga protagonizada por Lola MacHor escrita por Reyes Calderón.

Lola es una abogada que imparte docencia universitaria, está casada con un médico y tiene tres hijos. Y en estas recibe una citación a la lectura de un testamento que debe celebrarse en Pamplona en plenas fiestas de San Fermín. Y para allí que se va con su marido, y Alejandro y Clara hijos del difunto y amigos, es un decir, del matrimonio; ninguno se imagina la agitación que van a sufrir sus vidas a raíz de esta excursión.

La novela va y viene sin terminar de encontrar su sitio con lo que consigue aburrir en algunos momentos. Divaga entre ser un compendio de nociones básicas sobre los encierros y las ganaderías, de nociones básicas de práctica de autopsia y de nociones básicas del estado de derecho, cuando de ella se espera que sea una novela negra aunque se vista de blanco y rojo por las fiestas.

Más parece una Crónica de nuestro enviado especial o bien una Crónica de nuestro corresponsal, que una novela. Tal es lo que sugiere el modo en que está escrita. Es una novela que emplea poco recurso literario y mucho periodístico, siendo en las descripciones de lugares y ambientes donde más se nota y también en la falta de fluidez en los diálogos, poco naturales, poco reales, forzados.

Lo que sabemos de cada protagonista aparece contado por un único interlocutor a modo de biografía, y al no poder disponer del contraste de un enriquecedor intercambio de pareceres, resulta poco estimulante y es lo más parecido a una necrológica sin serlo.

Los currículum de cada protagonista son brillantes, lucen doctorados, y en cambio sus comportamientos son pueriles, con salidas de tono que no encajan en sus perfiles y por momentos muestran un histrionismo impropio del que de ellos se esperaría. El redactado abusa de palabras poco usadas en la calle, de rancio abolengo, que distancian aunque no quiera, y abusa de los signos de exclamación ¡más allá de lo soportable!

Durante un encierro en los sanfermines, un joven, en aparente estado de embriaguez etílica o por drogas, es corneado por un toro que, una vez liberado el estrés, sigue su camino hacia la plaza jaleado por los gritos y los movimientos de los mozos. Lola, y sus acompañantes se ven envueltos en la investigación por lo sucedido.


La novela es una gran exaltación a la fiesta pamplonica de San Fermín y en especial a la mística del toro, sobre la que pivota. Una glosa a Pamplona, a Navarra y a Hemingway. Tan localista que resulta el complemento ideal a una guía de viajes y un disfrute para los que conozcan la zona.

Reyes Calderón, la autora, ha conseguido crear un personaje que, por lo que sabemos, ha ido creciendo a lo largo de los casos en los que se ha visto envuelta. Hemos de suponer que la calidad ha ido de la mano de la producción y por ese motivo leeremos más casos de Lola MacHorn y no desesperaremos hasta encontrar aquello que no le hemos sabido encontrar esta vez.

martes, 1 de enero de 2013

Bookcrossing Interrobang Enero

El bookcrossing es una práctica extendida mundialmente destinada a dar mayor utilidad a los libros leídos posibilitando que lleguen a más lectores.

Blog interrobang ya hace tiempo que practica esta iniciativa y libera libros gratis para quien lo solicite primero y entienda que, como ofrecimiento altruista, se envian por correo ordinario. Por lo que si llegan, bien y si no llegan, no llegan. No se admiten reclamaciones ;-) Sea como fuere el libro quedará liberado, que es la finalidad primera de la iniciativa Bookcrossing.

¿Cómo pedirlos?

  1. Poner en comentarios a que título se opta si no lo ha pedido nadie antes.
  2. Enviar email a bloginterrobang@gmail.com para comunicar dirección postal donde recibirlo.
  3. Confirmar recepción para tranquilidad de que correos funciona.
  4. Entrar en http://www.bookcrossing.com/ y anotar en el cuaderno de bitácora del libro todos sus movimientos.
A leer y a disfrutar. La cultura no es un lujo, es un derecho.

En esta ocasión repetimos títulos aún disponibles y ofrecemos de nuevos especialmente indicados para iniciar a los más jóvenes.


El secreto de Chimneys
Agatha Christie
Editorial Molino
Selecciones de Biblioteca Oro, 156
Barcelona, 1982




Las siete iglesias
Milos Urban
Ediciones B
Bolsillo Zeta, 2639 / 1
Barcelona, 2005






Código azul
Andrew Gross
Ediciones Urano
books4pocket, Narrativa, 179
Barcelona, 2007




Fantasmes quotidians (Històries espantoses)
Andreu Martín
Editorial Planeta
Ramón Llull, Narrativa s/n
Barcelona, 1996
(En català)

La pirámide falsa
Andreu Martín y Jaume Ribera (ilustraciones de Max)
Ediciones SM
El clan de los marcianos, nº 2
Barcelona, 2003
A partir de 9 años






L’illa dels simiots
Joan de Déu Prats (il·lustracions Oscar Sardà)
Barcanova
Roc Tempesta
Barcelona, 2010
A partir de 10 anys
(En català)



Misterio del león nervioso
Alfred Hitchcock (texto de Nick West)
Editorial Molino
Los Tres Investigadores nº 16
Barcelona, 1982
A partir de 12 años





Feliz lectura y feliz 2013 para seguidores identificados, ocasionales y espontáneos! Sin vuestras visitas y vuestros comentarios los blogs no tendrían sentido.

jueves, 27 de diciembre de 2012

Los crímenes de Oxford y René Lavand

Magia y novela enigma perfecta pareja de baile. Baile lento, acompasado y sugerente.

En la novela “Los crímenes de Oxford”, Guillermo Martínez dedica un capítulo a describir casi literalmente una actuación del gran mago argentino René Lavand de forma que integra el concepto de la magia en el quore de la trama policiaca que se está desarrollando. Un intento de sugerir algo a través de ver lo que no existe.

Imbrica ambos géneros como se imbrican las cartas de una baraja: esponjando.

Esta novela enigma que bebe de los clásicos británicos de esta especialidad narrativa es un interesante juego intelectual al que el hecho de conjugarlo con la magia realza el sentido de espejo y reflejo, del que ambas artes son deudoras, ya que su sorprendente desenlace no deja de ser un logrado acto de prestidigitación.

René Lavand es un gran mago, aún en activo, que practica la magia de cerca con cartas, también llamada cartomagia, que no deben dejar de ver si quieren conocer un poco de la magia elegante e histórica con mayúsculas.

Histórica no por antigua, que también, sino porque el maestro René articula cada juego con una historia que va narrando pausada y musicalmente con lo que consigue que el momento, el instante, sea, todo él, mágico más allá del efecto que realiza con sus manos.

René es manco del brazo derecho que perdió siendo niño al ser atropellado por un coche. ¡Que gran mazazo para alguien que quería ser mago!, pero la ley no escrita de la voluntad y el tesón convirtieron en realidad la ilusión y hoy, un montón de años después, sigue por todo el mundo repartiendo ilusiones como si fueran realidades.

Sus juegos consiguen cautivar al auditorio que después de verlo actuar siente como si hubiera sido protagonista de las fascinantes historias vividas.

Cojan su ejemplar de Los crímenes de Oxford y dediquen unos momentos a releer el capítulo 21, son 7 páginas, y gocen de las palabras del maestro René Lavand y de su magia que basa en la Lentificación representada en este juego llamado No se puede hacer más lento (oficialmente conocido en el mundillo mágico como Agua y Aceite; cuando lo vean entenderán porqué).

Vean el video que muestra el juego citado y cuya actuación es una de las más logradas y aclamadas de este genial artista.  


Léan otros post que relacionan novela interrobang con la magia en este mismo blog pinchando aquí.

viernes, 21 de diciembre de 2012

Cuatro días de enero de Jordi Sierra i Fabra

Foto de no_pasaran @fermont1965
¿Existe vida cotidiana en la retaguardia de una guerra? Anormal, pero existe. Subsiste en un puñado de ciudadanos, sombras de cuerpos y caracteres que fueron y que hoy no son.

Se procura mantener la casa limpia, hacer la colada y cocinar lo que se tenga. Los que tienen trabajo acuden puntualmente para no perderlo y estar ocupados para no pensar, los que tienen negocio suben sus persianas y exponen a la vista estanterías más llenas de nada y de vacío que de artículos o productos, las jóvenes que pueden y quieren se ofrecen a cambio de regalos y comida, los ancianos mueren en sus casas o en la calle sin que a nadie importen, los más deambulan angustiados esperando un final de la contienda casi ya más preocupados por que acabe pronto que por el resultado de la misma.

De todos los horrores que ha sido capaz de inventar el ser humano en su incomprensible perverso sentido del humor, la guerra ocupa sino el primero si uno de los lugares más destacados. En una guerra no hay paz.

Y después de la guerra oficial, las ciudades de los ejércitos derrotados sufren otra guerra, más encubierta, más obscura, más malsana. Venganzas y odios estallan y las torturas, las violaciones, los juicios sumarísimos se suceden indiscriminadamente. Caro peaje el del bando perdedor.

Peor que luchar en el mismo frente, donde todo suele acabar muy rápido, está la retaguardia de los vencidos. Día a día sufriendo la paz impuesta por los vencedores.

Juego de palabras que se traduce por:
'Llega España. ¿A qué hora llega?

El comisario Miquel Mascarell, de la Generalitat de Catalunya y bando republicano, observa las dependencias vacías y desoladas en las que ha trabajado los últimos años. Se siente solo, sin más compañía que la tristeza y la melancolía. Sus compañeros, de hecho todo aquel que ha significado algo en el gobierno que se sabe perdedor, han empezado la huída, un exilio forzoso hacia la frontera.

Se oye que las tropas facciosas han cruzado el Ebro y que esto es el fin de la resistencia; es cuestión de días que entren en Barcelona. Una Barcelona disminuida por los incesantes bombardeos de la aviación insurgente. Todo aquel que sabe como las gasta el ejercito victorioso camina, pedalea, o se arrastra hacia una Francia que supone le acogerá como ganador de la derrota.

Reme, una prostituta redimida, acude a la comisaría de policía en busca de ayuda para localizar a su hija, Merche, de 15 años desaparecida desde hace dos días. Y solo está Miquel Mascarell para atenderla. Miquel sufre para no reírse ante lo que significa la sola idea de buscar a una joven guapa de la que no se sabe nada en una ciudad sin más efectivos policiales que él, sin jueces ni letrados, donde los cascotes ocupan solares enteros, donde los muertos de las calles ya no se recogen, donde la gente puede matar por un mendrugo. Donde la juventud es la mejor moneda de cambio.

Miquel que vive con su mujer Quimeta, a quien se la está llevando el cáncer como una bala se llevó hace poco a su hijo Roger en el barro de una trinchera, siente que su compromiso ético le obliga a seguir siendo policía aun cuando no deba explicaciones a nadie y aún sabiendo que permanecer en la ciudad cuando entren las tropas del auto proclamado generalísimo y caudillo puede suponerle la muerte o en el mejor de los casos la perpetua, antesala segura de una tuberculosis final.

Y aún así se decide a seguir la pista de Merche. Aunque sea su último caso.

Cuatro días de enero cala igual que el frío penetra en las entrañas del cuerpo mal protegido para soportarlo, igual que el cuchillo atraviesa el aire. Es una ficción dentro de una crónica veraz de un momento de nuestra historia que no hay que olvidar. No hace tanto que pasó. Quien más quien menos tenemos recuerdos vividos a través de nuestros padres o abuelos. No hace tanto que pasó y aún duele recordarlo.

Jordi Sierra i Fabra afamado novelista, cultivador multigénero, introduce una historia de novela negra en la Historia Negra de nuestro país. Un argumento construido por noticias veraces, testimonios recogidos de supervivientes y de informes y noticias de la época. Un discurso narrado con emotiva frialdad, un recordatorio de lo mucho que perdimos, un aviso para que no vuelva a suceder.

Una vez más, y aunque sea en época de guerra, Jordi Sierra i Fabra nos demuestra que el poderoso tiene poder y que ser quintacolumnista es su modo de recomponer el status perdido. Y que el dinero sigue siendo poderoso caballero.

Es una novela llena de tristeza donde no es difícil que afloren lágrimas al leerla, pero es una magnifica novela, comprometida, creíble, desarrollada en un escenario veraz y llena de carga emocional. Una novela que da voz a los derrotados sin entrar en proclamas políticas maniqueístas pero sin disimular la realidad.

Es la primera de una trilogía, y le siguen Siete días de julio y Cinco días de octubre, próximamente leídas y posteadas en este blog. Si no la conocen léanla y sabrán porque no hay que dejar escapar las otras dos.

Post Scriptum: reseñas de la serie Inspector Mascarell en este blog

1. Cuatro días de enero
2. Siete días de julio
3. Cinco días de octubre
4. Dos días de mayo
5. Seis días de diciembre