Cartel de Getafe Negro 2011 |
La novela, con un inicio vibrante y con muy buenas perspectivas tanto en sus primeros capítulos simultáneos en Barcelona como en Chicago, en donde se presentan los dos protagonistas principales, es de las que mantienen la tensión soterrada, una calma ficticia, y de las que concluyen en un final abismal, única alternativa que le queda a una novela cuando no se deja matar bien muerta.
El hilo de Ariadna es el mercadeo legal e ilegal de las obras de arte, la especulación de futuros y la falsificación de pasados. El dinero fácil seduce hasta el punto de la traición. Y nada molesta más a un ladrón que ser robado. De ahí que alguien empiece a tirar del hilo y se deshaga el ovillo.
David C. Hall |
Elso es contratado para localizar al posible ladrón de ladrones. Hay secretismo en quien lo contrata y hay secretismo en saber como encaja lo que va descubriendo. Quienes mueven los hilos eligen la música de baile y el que Elso se de cuenta de que está siendo manipulado no hace mejorar su situación, si bien le permite jugar las cartas de otro modo.
La trama se sostiene con la presencia de personajes que no pueden faltar en una novela negra: detective de Chicago que habla español por un tiempo que estuvo en Barcelona, asesina despiadada a sueldo del mejor postor que solo con sus atributos físicos ya es arma letal, mafioso ruso que está y no está, promotores inmobiliarios enriquecidos por la burbuja, ricos ociosos y aburridos, pareja de matones investigadores o viceversa... y con estos actores escenarios acorde: restaurantes, hoteles, viviendas y piscinas donde, entre lujo y sofisticación, se persigue el hedonismo sin mirar con quien.
Sitges Recuit de drap de Fonteta |
Y no es que se eche en falta per se, sino porque el perfil del personaje de Elso Bari, con interés por la gastronomía y con elegante y caro gusto en el vestir, lo demanda a gritos.
La novela denuncia que la corrupción tiene el brazo largo, de que todos son malos, incluso los buenos, de que todo está podrido y de que cada cual actúa en su propio beneficio y que si las cosas no acaban con The End solo significa que prosiguen.
Menos claro resulta el título y, como viene siendo exasperadamente habitual, diría que no es acertada la cubierta. Esa copa ¿que contiene?
Elso Bari precisa más cancha para desarrollar sus aptitudes, precisa otra oportunidad y David C. Hall está dispuesto a dársela. Wait and see.