Pues que firmaría como Tara Moss. Y no es un demérito para ninguna de las dos, o si, pero en cualquier caso queda dicho como una constatación y para conclusiones cada cual.
Tara Moss (1973) produce y participa en programas de radio y televisión y presume de haber pasado mucho tiempo en morgues, cárceles, comisarías, coches patrulla, juzgados, y practicando con armas, volando en helicópteros y asistiendo a actos en la academia del FBI, todo para documentarse y vestir con algo más que un tanga de color carne (única pieza propia de las modelos) el cuerpo de los argumentos de sus best sellers.
El resultado a ojos vista es que Tara Moss no hace novela negra, ni enigma, ni policial, por mucho que se empeñen en afirmarlo quienes bien la quieren y quienes le otorgan premios por ello. Es novela romántica salpicada de tópicos peliculeros para darle un toque de morbo pero desde luego poca literatura cabe en el envase del sexy thriller.
Makeede Vanderball, la protagonista, es modelo desde los 14 años y ya con veintitantos, y con el reconocimiento obtenido por ser portada de relevantes revistas y deseada en pasarelas, renuncia a la exclusividad fulll time de su profesión para centrarse en sus estudios, costeados gracias a interminables sesiones fotográficas y desfiles por pasarelas. Es psicóloga forense y está cursando un master y preparando su tesina.
Es una belleza rubia natural de melena en cascada, alta, mide 1,80 cms, largas piernas y delgada, como toda modelo que quiera hacer carrera. Su madre acaba de fallecer de cáncer y su familia directa la forman su padre, Les, policia retirado, y su hermana Theresa, tres años menor y de talante conservador y sin más aspiraciones que ser una buena esposa, buena madre y buena ama de casa.
Cualquier parecido con la autora, Tara Moss, modelo de reconocido prestigio, en pasarelas y portadas hasta los veintitantos, licenciada en periodismo, de largas piernas y una altura de 1,85, madre fallecida de cáncer, un mieloma múltiple, y padre y hermana como única familia directa, es pura coincidencia.
Pero cada cual escribe de lo que sabe, de los lugares que conoce, de las personas que le inspiran. Y es normal que el/la protagonista tenga siempre algo de quien escribe. A modo de alter ego.
Pero cada cual escribe de lo que sabe, de los lugares que conoce, de las personas que le inspiran. Y es normal que el/la protagonista tenga siempre algo de quien escribe. A modo de alter ego.
Fetish es una novela que transcurre en Sidney, levantada a base de tópicos que funcionan: sexo, sangre, comida japonesa, toques cosmopolitas y bella y bestia. Es la presentación de Makedee (Makeydí como ella no se cansa de repetir ya que nadie pronuncia su nombre correctamente) y la del Asesino de los Tacones de Aguja, psicópata fetichista de comportamiento lúbrico y escabroso hasta aburrir que fija su atención en ella con lo que esto supone. La novela sigue el patrón que debe estar en algún sitio bajo el título Las diez reglas básicas para escribir un thriller y bien podría ser un apañadito trabajo de instituto.
Split, su segunda novela y enlazada con la primera, aunque legible de forma independiente, transcurre en Vancouver y es aún más sosa y romántica que la anterior, aunque intercale retazos intelectuales en forma de ensayo sobre el comportamiento asesino de psicópatas y similares para darle más prestancia. Otro serial killer hace su aparición y Makedee, que parece un imán para este tipo de personajes, se ve envuelta en una situación de alto riesgo. Otro episodio de Los peligros de Pamela. La actuación policial es de sit com de risa y el desenlace es tan apresurado como poco plausible.
Alexis Ravelo, gran escritor de los de verdad, recuerden aquí su serie con Eladio Monroy, escribía hace nada en Revista Calibre 38 un lúcido artículo que expresa menos eufemísticamente la realidad de este mundo literario plagado de subproductos. Léan, leán y verán como el mejor Château que guardan en su despensa igual es de garrafa. El envase, por muy logrado que sea, puede engañar.
Post scriptum: atendiendo los comentarios de la autora, vean en este blog la reseña de su novela Te encontraré.
Post scriptum: atendiendo los comentarios de la autora, vean en este blog la reseña de su novela Te encontraré.