Novela negra circular que deja la boca seca y el cerebro atropellado. |
Mississippi, la América profunda en una época,
1959, oscura y peligrosa especialmente para mujeres y negros.
Las primeras por su atractivo y debilidad, los segundos por su color.
Jerry Wooster es joven que deja atrás su familia, sus
amistades, su pueblo y su trabajo como ayudante de mecánico por motivos de
supervivencia y justo a partir de ese momento empieza de verdad a comprender
aspectos de la vida que no se había planteado. Está en esa edad en la que no
hay mañana.
Rebeldía, corrupción y nepotismo. Sexo, violencia y
racismo. Bourbon, música y baile. Coche, guitarra y pistola.
Una road novel, country noir. En la que se recorren lugares para encontrarse sin darse cuenta de que
el que mira no se ve a sí mismo. Jerrry Wooster y Sandra O'Connell coinciden en
el lugar adecuado y en el momento oportuno. Y ambos, aunque por intereses y
motivos distintos, deciden emprender su huida juntos.
Y aunque por momentos sean tres, Bobby, un joven
guitarrista negro es recogido haciendo auto-stop, su relación, pese a su dispar
criterio y diferencia de edad, se consolida y tiene visos de continuidad
mientras queman asfalto.
Un recorrido geográfico vivencial y contaminado. Una magnífica historia de amor, de odio y de venganza musicalizada a ritmo bailón y del Buick Skylark blanco de Sandra.
J.J.M. Veiga |
J.J.M. Veiga ha escrito una novela negra circular que
deja la boca seca y el cerebro atropellado. De esas novelas que se recuerdan
por mucho tiempo que pase. Una de esas que firmaría Jim Thompson, con el beneplácito
de Faulkner y de Shepard, si los anacronismos fueran posibles. Una novela que incita a ver cine negro del bueno.
Con un personaje, Jerry Wooster, implacable que
una vez fue inmaduro, como el maíz antes de la siega. Y que por momentos recuerda al Holden Caufield del
El guardián entre el centeno.
Narrada en primera persona pero con saltos temporales que
permiten disfrutar de una lectura sorpresiva y de un relato con una curiosa
dualidad de sheriffs gracias a una estructura narrativa muy original.
Es una novela de apariencia sencilla pero ni de lejos. Su
redacción, su desarrollo y su decisivo final dan buena fe de ello.
Indispensable. Noir cien por cien americano confeccionado
en la Louisiana de Pontevedra que no pueden dejar de leer. Y ojo a la cuidada
edición de Bandaàparte Editores.
Cuando
el destino nos alcance el maíz seguirá creciendo es la
última compra recomendada por Miguel Ángel efectuada en SomNegra antes de su
cierre, y acertó como siempre. Y eso no es suerte, es conocimiento y por eso
esta reseña os está dedicada, tándem SomNegra y Miguel Ángel.