El maldito (The Damned) es una serie de cómics
protagonizada por un tipo de aspecto taciturno y resignado que sobrelleva como
puede una maldición demoníaca que le permite morir pero no permanecer muerto:
tiene la involuntaria facultad de resucitar al contacto con un vivo.
En este primer tomo se
agrupan los cómics que conforma el primer arco argumental de la serie bajo el
título El maldito: tres días muerto.
Eddie Morgan, el
protagonista, él es el maldito, sabe nadar y guardar la ropa por lo que sabe
mucho de todos y sabe donde, cuando y como moverse, lo que lo faculta a tratar
con todas las partes.
Por eso es elegido para intervenir
como intermediario en un intento de tregua que ha de evitar una guerra de
bandas de… demonios. La naturaleza de estos seres convierte lo que debería ser
una gang band convencional en algo original que utiliza argumentos
insospechados y estimulantes en el posicionamiento de las familias, la de
Alphonse Aligheri y la Bruno Roarke, por controlar el tráfico de almas. Han
leído bien, almas y no armas; para eso son demonios.
Eddie no parece tener
oficio, aunque muestra maneras y comportamientos con dosis de ingenio e
inteligencia y habilidades de detective privado que son las que le permiten ir
sorteando las complicadas situaciones, reyertas, trampas y persecuciones, en
las que se va a ver involucrado en su misión.
El cómic es de serie
negra pura pero al encuadrarlo en un mundo sobrenatural convierte esa América,
de la época de la ley seca y el gatillo fácil, en un escenario de fantasía
donde un demonio de nutrida y sofisticada cornamenta, como los mamíferos
astados cuantas más puntas más respetable, puede ser más aterrorizador por su
posición que por su condición.
La historia es un compendio
de personajes imprescindibles del género: mafiosos, guardaespaldas, soplones,
femme fatale… que se mueven por los lugares que nunca deben faltar en una buena
historia de serie negra: suntuosas viviendas, opulentos despachos, selectivos
burdeles y hediondos callejones, claustrofóbicos rings de boxeo y mortecinos
moteles.
Protagonistas y lugares
adecuados para desarrollar una ingeniosa historia de suspense ambientada en lo
fantástico y con toques esotéricos. No todo guionista es capaz de tejer algo
coherente con estos mimbres y Bunn lo borda.
Cullen Bunn narra con ritmo vivo un argumento complejo,
variado y dinámico que, sin salirse de la línea del genero negro, se permite
humor y sorpresas al jugar con protagonistas del inframundo más aferrados a los
placeres y deseos que cualquier humano, tal vez por su naturaleza más viciosa y
pervertida.
Brian Hurtt compone la visión gráfica iluminada con multitud
de gamas de grises y con un dibujo de trazo elegante y sinuoso que evoca en
muchos momentos al del maestro Will Eisner, e incluso se permite viñetas
cómicas, gracias al pie que le da el guionista, que se dirían extraídas de planchas
de Spirit.
En la historia se cuenta
incluso el porqué los demonios viven con los humanos y también se habla del
limbo y de su importancia como transito de la vida a la muerte. El argumento es
prolífico en detalles y no deja ningún cabo suelto por lo que, una vez superada
la sorpresa inicial de tratar con demonios, nada es gratuito.
El trabajo combinado de
ambos, Cullen Bunn y Brian Hurtt, ofrece una historia integral de serie negra
que recuerda al cine negro de la época y en su aspecto más purista no olvida la
parte sensible y romántica hábilmente trenzada con numerosas situaciones
violentas y otras de ruidosa balacera.
El cómic se disfruta y se
paladea con fruición, como ese caramelo que resistimos a tragar. Toda una
sorpresa para los amantes de lo noir y un festín para los que disfrutan
de los híbridos; ambos encontraran multitud de guiños a grandes obras de la literatura,
del cine y del mundo del cómic, como el ya mencionado Spirit.
Esta es una de esas
publicaciones que, lamentablemente, se escapan de vez en cuando al radar y que
gracias a la recomendación de Roberto Corroto he podido recuperar y sobre todo
disfrutar.
En EEUU la serie ha
tenido continuación en Damned: Prodigal Son (El hijo pródigo)
segundo arco argumental que si se ha publicado en Francia (Les fils
prodigues), pero por aquí de momento no hay noticias de su publicación.
En EEUU también se han
interesado tanto por adaptarla al cine como para televisión sin que hasta el
momento haya cuajado. Pero al tiempo.