Pero si les voy a pedir que lo prueben, que entren en http://www.bookcrossing.com,
• Dense de alta, e-mail y contraseña y perfil opcional
• A continuación cojan el libro que deseen dejar en libertad (no se preocupen hay gustos para todo) y entren el título y el autor en la página de registro
• Ahora Bookcrossing les devolverá un número identificador único para ese libro.
• Escríbanlo en la cubierta, en la solapa, en páginas interiores, en una etiqueta y péguenla e indiquen que se trata de un libro libre.
• A continuación cojan el libro que deseen dejar en libertad (no se preocupen hay gustos para todo) y entren el título y el autor en la página de registro
• Ahora Bookcrossing les devolverá un número identificador único para ese libro.
• Escríbanlo en la cubierta, en la solapa, en páginas interiores, en una etiqueta y péguenla e indiquen que se trata de un libro libre.
Y ahora lo mejor: el momento de liberarlo. Es una sensación como de hacer algo prohibido que en lugar de culpa genera satisfacción.
Es un instante flash. Y además la primera vez nunca se olvida.
Pueden liberarlo en un café, en una granja, en la sala de espera del dentista, en un tren, en la mesilla de noche de un hotel, envuelto en plástico por si llueve y ocultado en la oquedad de uno de esos enormes árboles que hay por las ciudades y que en otoño alfombran las aceras de hojas marrones y crujientes, en fin en cualquier lugar que se les antoje, pero con disimulo para evitar que nadie diga aquello de “¡eh, que se olvida el libro!.
Y si lo dejan en un lugar público y se apostan a vigilar, viene la segunda disfrutada: el acto de voyeurismo que supone ver como el libro es cazado. Y por quien. Y como. Y si hay tiempo, ¿porque no?, seguir al cazador.
Y disfruten cuando reciban noticias del periplo del libro quien sabe de cuantos lectores, en que país o en cual continente.
Hagan la prueba, elijan cualquiera de estas fechas cercanas antes de que acabe el año y liberen una novela interrobang. Y cuenten en comentarios como les ha ido su primera vez.
Predico con el ejemplo:
el lunes 20 de diciembre sobre las 19:00 liberaré "Muerte entre poetas" de Ángela Vallvey, en el McDonal's de la estación de Sants de Barcelona.
Liberar un libro es sembrar semillas de nuevos lectores.